Ducharte con agua fría antes de dormir no es buena idea por este motivo

Aunque ha tardado en arrancar por la inestabilidad climática, el verano ya se encuentra en su máximo esplendor. Los termómetros han superado los 40 grados en algunas zonas de España, abriendo paso al calor. Durante la época estival, aumentan las precauciones y recomendaciones, evitando un sufrir un problema de salud por las altas temperaturas.

Si el calor reduce el apetito, ¿por qué en verano ganamos algunos kilos de más?

La temperatura corporal está vinculada estrechamente con la sensación de calor. Por esta razón, muchas personas no solo recurran a alimentos o bebidas frías, sino que también aprovechan el momento de la ducha para refrescarse. En este aspecto, las duchas con agua fría ofrecen una solución inmediata, pero puede repercutir negativamente.

Esta costumbre puede ser una contradicción, especialmente antes de dormir. Los especialistas opinan que el cuerpo sentirá que la temperatura del agua es inferior a la corporal, y en consecuencia, generará todavía más calor para regularse. Por este motivo, podrá resultar contraproducente, sobre todo en verano.

La doctora María José Martínez ha explicado en 'El Debate', que la mejor solución es ducharse con agua templada, ni fía ni caliente. "Aunque parezca contradictorio, si aplicamos calor sobre la piel favorecemos que los vasos sanguíneos se abran, dilaten y entonces expulsen el calor", afirmaba la coordinadora de trabajo de Cronobiología de la Sociedad Española del Sueño.