La denunciante de Conde-Pumpido suma 29 casos abiertos en Brasil

Este pasado judicial se ha revelado en medio del escándalo actual

Cándido Conde-Pumpido Varela, en una imagen de archivo.

Cándido Conde-Pumpido Varela, en una imagen de archivo. / EFE

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La historia de Aline, la mujer que acusó al hijo del presidente del Tribunal Constitucional, Cándido Conde-Pumpido, ha tomado un giro aún más sorprendente. Tras ser el foco de atención por su denuncia de violación, ahora se revela un pasado oscuro y violento en Brasil. Según informes de Código 10, Aline enfrenta una orden de busca y captura en su país natal por intento de homicidio.

La escalofriante historia incluye un apuñalamiento a un joven con el que tuvo un encuentro a través de una aplicación de citas. Consumida por los celos durante un intento de trío, Aline agredió brutalmente al hombre con cuchillos de cocina, causándole graves heridas en el pecho.

La víctima, identificada como Diego, ha compartido su versión de los hechos, explicando que acordaron añadir a otra mujer a su encuentro y que Aline, repentinamente, sufrió un brote psicótico, apuñalándolo tres veces en el costado derecho.

La rápida intervención y cirugía de urgencia salvaron su vida milagrosamente. Sin embargo, Aline huyó y contactó con Diego desde la UCI para amenazarlo. Su historial delictivo incluye varias estafas, acoso a su exmarido, altercados con la policía y tráfico de estupefacientes, sumando un total de 29 causas en su contra.

Lo más asombroso es que Aline logró eludir a las autoridades brasileñas y escapar a España, donde comenzó a ejercer la prostitución de lujo. Su encuentro con Cándido Conde-Pumpido Jr., a quien conoció en una discoteca, la llevó a denunciar una presunta violación en grupo.

Sin embargo, la incoherencia de sus testimonios y las pruebas de las cámaras de seguridad llevaron a la liberación de los acusados. La historia se vuelve más intrigante al revelarse que Aline retiró su denuncia poco después, alegando falta de recuerdo debido a su estado de embriaguez, mientras que Conde-Pumpido permanece ingresado en una clínica psiquiátrica.