Críticas a una conocida brasería de Barcelona por el estado del local: "No se puede estar sudando y comiendo"

Los clientes son muy duros en sus valoraciones

El servicio, el gran damnificado en las opiniones

Un buen plato de carne

Un buen plato de carne / SPORT.es

Mantener un restaurante en condiciones óptimas no es tarea sencilla. Lo demuestra que es uno de los puntos a tener en cuenta a la hora de valorar locales en casi cualquier aplicación del mundillo. Y no, esta brasería no pasa ese filtro.

Muchos han sido los clientes que han valorado muy negativamente su organización, su comida o incluso su aire acondicionado. "No es la primera vez que voy a comer y los aires acondicionados no funcionan, no se puede estar sudando y comiendo, me parece vergonzoso que un restaurante de esa envergadura tenga estos problemas" explicaba un cliente.

Otro de los ataques más bestias que hemos leído en los comentarios, es el de un usuario que protestaba por la higiene de un cocinero: "Hay una persona cocinando con los pelos largos sin guantes, limpiándose la nariz con las manos y cogiendo la comida con la mano, teniendo la mala suerte que en nuestra comida encontramos uno de sus pelos largos..."

Incluso alguno elabora teorías más complicadas sobre la calidad del servicio: "Creo que el truco para ser bien atendido en este restaurante es conocer a los camareros... El servicio es malo."

Comer en algunas cadenas grandes entraña riesgos. El personal rota mucho por lo que a veces la experiencia no es adecuada. El beneficio prima sobre la calidad y la masificación puede afectar a la calidad del servicio. Para muestra de esta afirmación, este restaurante.