Una concursante de 'First Dates' queda asombrada por la inesperada conexión entre su cita y su ex: "Fue una sorpresa".

Pilar y Marcelo tuvieron una cita que empezó con mal pie

La vestimenta fue un problema durante la cena para ella

First dates

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SPORT.es

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'First Dates' suele dejarnos momentos de lo más peculiares y extraños, al menos en ciertas ocasiones. Aunque el objetivo del programa es que los participantes encuentren el amor, no siempre se cumple.

El programa está presentado por Carlos Sobera. Se estrenó en 2016, y tanto ha sido su éxito que ha sido proclamado como un programa de referencia de Cuatro. Los espectadores pueden disfrutarlo de lunes a viernes a las 21:05 horas.

'First Dates' junta a parejas en una cita a ciegas. Estos participantes mantendrán una conversación durante una cena en la que se conocerán y verán si realmente son compatibles o no. Al final del encuentro, decidirán si han tenido gustos afines y quieren seguir conociéndose, o si, por lo contrario, prefieren no saber nada el uno del otro.

En este caso el programa juntó a Pilar y Marcelo. La dama soltera, con 67 años de experiencia en la vida, llegaba al restaurante confesando con humor ser una entusiasta del verano. "No tengo ningún problema en lucir mis piernas y disfrutar del sol en la playa," decía. Añadía que su estado civil había pasado por el matrimonio, pero este había llegado a su fin debido a que "el amor se desvaneció." "Después de divorciarme, redescubrí el placer de bailar", declaraba con entusiasmo.

Su acompañante para la velada era Marcelo, un soltero de 72 años, que se consideraba un espíritu optimista. Sin embargo, al cruzar la puerta del restaurante, la dama soltera experimentó una pequeña decepción. "Lamento decirlo, pero no me siento atraída. Cuando lo vi entrar... su elección de ropa me desilusionó. No tiene mucho estilo," compartía. Marcelo, por otro lado, tenía una perspectiva diferente y afirmaba que "no se dejó intimidar."

Laura Boado los guió hasta su mesa, donde compartieron que ambos habían experimentado el divorcio y ahora disfrutaban de su jubilación. Pero a medida que Pilar conocía mejor a Marcelo, le quedaba claro que no era el hombre de sus sueños. "No me sentí atraída. Puede ser una persona agradable, pero no sentí ninguna conexión", explicaba.

En un momento inesperado, Marcelo revelaba su edad, 72 años, que no aparentaba en absoluto. Sin embargo, lo más sorprendente para la dama soltera fue descubrir que compartían la misma fecha de nacimiento que su exmarido. "¡Dios mío, es increíble!", exclamaba, casi sin palabras. "Mi exmarido también nació el 30 de septiembre. Qué coincidencia," comentaba. "Lamento decirlo, pero esto me desanima", añadía.

Después de este impactante descubrimiento, Marcelo mostraba curiosidad por conocer a su exmarido, pero Pilar rápidamente frenaba sus expectativas y le decía que eso nunca ocurriría. "Cada uno en su propio lugar. Él en su casa y yo en la mía," sentenciaba.

En la fase final de la cita, las diferencias entre los dos solteros seguían siendo el tema principal de conversación. Pilar le sugería a Marcelo que visitara Jerez de la Frontera para ver la exhibición "Cómo bailan los caballos andaluces," pero él confesaba ser un amante de la tauromaquia, lo cual no le agradaba a Pilar. Por lo tanto, en la decisión final, no hubo sorpresas, y ambos optaron por no continuar la relación.