La plantilla del Espanyol no está cerrada

A la dirección deportiva del Espanyol se le acumula el trabajo. Lo admitió el propio Rufete en la presentación de Morlanes y Aleix Vidal. “Estamos planificando las salidas para volver a tener recursos. Teníamos el trabajo hecho hace un mes y medio, pero hemos estado parados por el límite”, explicó. Tras la llegada del centrocampista y del lateral, que puede actuar también de extremo, el cuadro blanquiazul debe desencallar la situación de los que no cuentan para Vicente Moreno antes de traerle más refuerzos al técnico.

Lo prioritario es aligerar el ‘overbooking’ en el lateral derecho. Óscar Gil, Miguelón y Víctor Gómez se suman a Vidal, por lo que al menos uno de ellos debe salir. Gil parece el único con el puesto asegurado. Asimismo, en la línea defensiva el adiós de Lluís López abre la posibilidad de que llegue un central, aunque no es una operación imprescindible puesto que David López es una opción viable en caso de necesitarlo.

Más preocupa la situación del ‘Monito’ Vargas. La perspectiva con el extremo es igual o peor que antaño, por lo que debe salir sí o sí. El problema es que su caché está devaluado y al tener una ficha muy alta cuesta encontrar un destino que satisfaga a todas las partes. “Es un activo del club y queremos que tenga minutos, estamos buscando junto a él para que los pueda tener. Él sabe la situación, el objetivo es que salga para tener minutos y el club siga manteniendo su patrimonio. Estamos a la espera de que llegue algo que nos haga sentir a gusto a ambas partes”, reconocía Rufete.

También se trabaja en una cesión para Pol Lozano, siendo el Girona la opción que más fuerza tiene tal y como adelantó ‘La Grada’. Su salida facilitaría la llegada del ‘6’ que desea Vicente Moreno, otra de las operaciones encalladas que tiene ahora sobre la mesa Rufete.

Gusta Loren

Precisamente los compañeros de ‘La Grada’ desvelaron que la posibilidad de que Loren recale en el RCDE Stadium vuelve a coger fuerza. Su nombre ya había sido relacionado con el club y según el citado medio hay buena predisposición por ambas partes. No obstante, su contrato hasta 2024 con el Betis y su ficha de dos millones de euros representan un problema. Sylla, Manu Vallejo o Rubén Sobrino son alternativas que maneja la dirección deportiva.