Los errores defensivos condenan al Espanyol en Granada

El Espanyol dejó pasar una gran oportunidad en su intento de abandonar el farolillo rojo con una dura derrota del Granada (2-1). Los de Abelardo hicieron méritos para lograr al menos un empate pero de nuevo, como ha pasado durante toda la primera vuelta, las desconexiones en defensa le han costado muy caras. Javi López y Naldo salieron en la foto para que Machís y Carlos Fernández remontaran el tanto inicial de RDT, de penalti. El ariete lleva cuatro goles en cuatro partidos y mandó un balón al palo en una segunda mitad donde el cuadro perico acosó sin premio.

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Liga Santander

GRA

2

1

ESP

Alineaciones

Granada
Rui Silva; Duarte, Germán, Neva; Puertas, Herrera, Gonalons (Eteki, 79'), Machís (Foulquier, 69'); Soldado (Azeez, 61') y Carlos Fernández.

Espanyol
Diego López; Javi López, Naldo (Melendo, 81'), Cabrera, Dídac; Darder, Iturraspe (Vargas, 61'), David López, Embarba; De Tomás y Calleri (Wu Lei, 73').

Goles

0-1 M. 27 De Tomás (penalti). 1-1 M. 38 Machís. 2-1 M. 46 Carlos Fernández.

Árbitro

Cuadra Fernández (balear). TA: Soldado (29'), Germán (48'), Gonalons (49') / Iturraspe (55'), David López (88') y Dídac (93').

Incidencias

Estadio Nuevo Los Cármenes. 15.226 espectadores.

Se podría decir que hubo dos primeras mitades. En los compases iniciales el duelo apenas dejó jugadas para los highlights y Rui Silva y Diego López ni se ensuciaron los guantes. Nada que ver con lo que deparó el partido pasado el ecuador del encuentro. Y es que no por repetitivo dejará de ser menos verdad, pero RDT es el hombre que necesitaba este Espanyol. El ex del Benfica no había entrado en juego pero en el primer balón en condiciones que le llegó provocó un penalti que él mismo transformaría. Hubo cierta polémica porque según qué toma televisiva el derribo de Duarte se veía más o menos claro. Las decisiones rigurosas a veces caen a favor y otras en contra y hoy le salió cara a los de Abelardo.

El tanto dio paso a los mejores minutos del Espanyol, que pudo haber encarrilado el duelo. El propio De Tomás y sobre todo Darder, gozaron de ocasiones para doblar la renta. La del de Artà fue más que clara, con un remate solo en el segundo palo tras una gran jugada de Calleri. Cierto es que llegó forzado y le pegó con la zurda. El balón se perdió por encima del larguero y del posible 0-2 se pasó al 1-1.

Javi López dejó descubierto su banda por salir al choque con Carlos Fernández, que le ganó el duelo y filtró para Machís que se la coló a Diego entre las piernas. Los de Diego Martínez, hasta entonces algo nerviosos, tomaron el control del duelo y el asueto le vino mejor al Espanyol. Lo que nadie esperaba era la pesadilla en el inicio del segundo tiempo.

Desconexión imperdonable

Quince segundos bastaron a Carlos Fernández para poner por delante al Granada. Error imperdonable de un defensa con la experiencia de Naldo, que quiso proteger el balón en la línea de fondo pero se dejó robar la cartera por Machís. El venezolano asistió a Carlos y el delantero cedido por el Sevilla la puso a la escuadra. Los errores individuales volvían a condenar al conjunto blanquiazul, que debía remar a contracorriente.

El Espanyol se adueñó claramente del cuero con más del 70% de la posesión y empezó a inclinar el campo. A la hora de juego Abelardo dio entrada a Vargas por Iturraspe y lo primero que hizo el ‘Monito’ fue poner un centro que De Tomás cabeceó a la madera. El tanto no llegó por milímetros, pues el balón se paseó casi sobre la línea de gol. RDT lo intentó incluso desde el medio campo y poco después fue Embarba en su jugada típica desde fuera para dentro el que lo probó.

El Granada resistía hundido atrás y Abelardo quemó todas las naves quitando a Calleri y Naldo por Wu Lei y Melendo. Con más corazón que cabeza, los minutos se le empezaron a escurrir como arena entre los dedos y a pesar de los cinco minutos de prolongación el Espanyol no logró el tanto del empate. La imagen y el juego del equipo fueron buenos en general, pero hay que poner fin a las desconexiones atrás antes de que sea demasiado tarde.