El Espanyol inicia su descanso navideño en un momento agridulce

El equipo españolista es el segundo peor visitante de Primera con tres puntos, solo por delante del Levante

El vestuario y el cuerpo técnico asumen que deben dar un paso adelante en los desplazamientos

El Espanyol, con margen de mejora

El Espanyol, con margen de mejora / @RCDEspanyol

EFE

El Espanyol disputó su último partido de LaLiga el pasado 17 de diciembre contra el Celta en Balaídos (3-1) y no regresará a los entrenamientos hasta el próximo fin de semana, unos días en los que el equipo aprovechará para recargar pilas y volver con fuerza para mejorar sus últimas sensaciones.

Los catalanes disfrutan de una posición cómoda en la clasificación. Actualmente son décimos con 23 puntos, están a 4 de los puestos europeos y a 8 del descenso. Se trata de una ubicación tranquila en la tabla que, sin duda, supone una buena noticia después de militar la temporada pasada en la Segunda División.

De todos modos, las sensaciones con las que afronta el Espanyol su particular parón navideño son agridulces. El buen rendimiento del bloque en algunos tramos contrasta con la impresión de que el conjunto blanquiazul no da el salto de calidad esperado por su afición, especialmente por los resultados fuera de casa.

El choque contra el Celta, tal como lo definió el entrenador, Vicente Moreno, fue uno de los peores partidos del Espanyol. Además, el tropiezo en Balaídos se suma a unos números nefastos lejos del RCDE Stadium: el Espanyol es el segundo peor visitante de Primera con tres puntos, solo por delante del Levante.

El vestuario y el cuerpo técnico asumen que deben dar un paso adelante fuera. De todos modos, la fotografía global del equipo hasta este descanso semanal no invita, ni mucho menos, al alarmismo. De hecho, el Espanyol es, de algún modo, víctima de su propio éxito al elevar el nivel de exigencia y expectativas de su afición.

Por otra parte, el descanso semanal servirá para recargar las pilas de a plantilla. El equipo, entre LaLiga y la Copa del Rey, donde ya ha pasado dos rondas, ha disputado tres partidos en seis días: ganó al Levante (4-3), eliminó al Cristo Atlético (1-2) y perdió contra el Celta (3-1).