Isinbayeva, la musa de los Juegos

Yelena Isinbayeva (3 de junio de 1982) vuelve a rugir con fuerza y con ella lo hace uno de los iconos del atletismo. La pertiguista rusa logró el sábado el vigesimoprimer récord mundial de su carrera en su debut en 2008, después de dos años algo más grises que coincidieron con su cambio de entrenador. Tras su oro mundial en Helsinki'05, dejó a su técnico de siempre, Yevgeni Trofimov, y comenzó a trabajar con Vitali Petrov, el forjador de Serguei Bubka. Y... por fin afloran los resultados, ya que Isinbayeva aprovechó la reunión que organiza en Donetsk su mentor -Bub-ka- para elevar el tope mundial en pista cubierta a 4,95 metros.

Tras múltiples dudas iniciales y en contra de la opinión de Bubka, la IAAF incluyó en su programa la pértiga femenina en los 90. Se decía que el físico de las mujeres no era adecuado para esta disciplina, que no atraerían al público, que sería un fracaso... Patrañas. Isinbayeva ha convertido la pértiga femenina en una de las pruebas estelares de la actualidad.

La rusa no pierde una gran competición desde que, con sólo 21 años, fue plata en el Mundial de París'03, por detrás de su compatriota Svetlana Feofanova y de la alemana Annika Becker. Desde entonces, ha subido a lo más alto del podio en todos los campeonatos. A saber: Mundiales al aire libre de Helsinki'05 y Osaka'07, Juegos Olímpicos de Atenas'04, Mundiales en pista cubierta de Budapest'04 y Moscú'06, Europeos al aire libre de Göteborg'06, Europeos bajo techo de Madrid'05 y Copa del Mundo de Atenas'06.

"Lo siento, no quiero parecer presuntuosa ni soberbia, pero si compito a mi nivel, las demás no tendrán ninguna opción. Las cosas son así", declaraba Isinbayeva en vísperas del pasado Mundial al aire libre. Puede parecer osada, incluso prepotente, pero no hacía más que explicar la realidad. Es la mejor pertiguista de la historia, se ha convertido en uno de los grandes iconos del atletismo y pasea su incomparable 'glamour' allá por donde va.

Pero... ¿por qué es tan superior? En opinión del entrenador ruso Yevgeni Bondarenko, "la gimnasia le dio disciplina en el trabajo diario y le permite controlar a la perfección su cuerpo en el aire". Por su parte el técnico británico de pértiga, Steve Rippon, asegura que "técnicamente es tan buena como los hombres; de hecho, la segunda parte de sus saltos es quizá la mejor del mundo, contando hombres y mujeres". Además, transforma mejor que nadie en potencia la velocidad horizontal para elevarse lo más alto posible, la llamada 'Fase L' del salto'. Además, es capaz de manejar pértigas más duras y largas -4,50 metros- que el resto de las saltadoras.

Con estas premisas, el resultado no podía ser otro que su gran superioridad, una superioridad que a veces resulta tan 'insultante' que cuando la rusa inicia la competición, la totalidad de sus rivales han sido ya eliminadas. "Quiero superar los 35 récords mundiales de Bubka", no se cansa de repetir la de Volgogrado. Y, sin duda alguna, los tiene en sus manos y en sus piernas.

Yelena Gadzievna Isinbayeva será uno de los grandes reclamos mediáticos de los Juegos de Pekín, en los que buscará su segundo título olímpico consecutivo y quizá el penúltimo -pretende aguantar al menos hasta Londres 2012-. La rusa, de sólo 25 años, representa la belleza, la calidad, la potencia, la majestuosidad y la limpieza en el mundo del deporte... Una diva.

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