Belmonte, una campeona en el diario SPORT

Mireia visitó la redacción de SPORT tras aterrizar en Barcelona con su medalla de oro, su récord del mundo y energías renovadas para el futuro

Estaba cansada, muy cansada. A las seis de la mañana empezó un largo viaje de Rijeka a Venecia en autobús, luego el avión hasta Barcelona, donde aterrizó al mediodía, y desde entonces no paró de atender a los medios de comunicación. También tuvo un momento para pasar por la redacción de SPORT, donde explicó sus sensaciones tras proclamarse la nadadora más rápida del mundo en los 400 estilos y también sus planes de futuro. Mireia, esta joven nadadora que jamás deja de sonreír, acaba el año de la mejor manera: "Sí, este récord y esta medalla es el punto al año 2008, que ha sido muy bueno para mí y confirma que estoy en un buen momento de forma", comenta.

Belmonte dejó el récord de los 400 estilos en 4.26.06 gracias a una excelente carrera en la que "me dejé la vida en la posta de crol". Sin embargo, antes de lanzarse al agua la badalonesa no podía pensar que llegaría a tanto: "No me lo imaginaba, yo iba a ganar, a hacer una buena marca pero no me esperaba lograr el récord del mundo", reconoce.

La primera nadadora catalana en lograr un récord mundial no tiene miedo a ser la nueva referencia en los 400 estilos. Es clara en este aspecto: "Me gusta ser la mejor. Es algo que nunca había conseguido, había logrado récord de Europa pero no del mundo", asegura sin complejos. Y es que Mireia tiene madera.

Se da la circunstancia de que solamente dos nadadores españoles habían logrado plusmarcas mundiales con anterioridad, Nina Zivanevskaya y Martín López Zubero, y ambos pertenecían en ese momento al Club Natació Sabadell, al que se ha integrado Belmonte hace unos días. La nadadora badalonesa tiene la respuesta a la coincidencia: "Que hayan sido tres récords del mundo con el Club Natació Sabadell quiere decir que tiene algo este club, que es un club de campeones", sentenció.

Para explicar el secreto a este nuevo éxito a su carrera Belmonte explica que "sobre todo he entrenado mucho la espalda porque la braza tenía un problema en el adductor y no podía trabajarla mucho al principio de temporada".

Cuando llegó el momento de las dedicatorias, la nueva recordwoman se acordó de alguien que suele olvidarse en esos momentos de éxito: "Dedico el triunfo a todos los nadadores y a la gente fanática de la natación que nos apoyan cada día estemos arriba o no", por su puesto que Mireia también se acordó de los suyos: "También lo dedico a mis padres y a mi familia", que desde que aterrizó a Barcelona no se han separado un segundo de ella.

Los objetivos a partir de ahora son claros: "El Mundial de Roma" aunque asegura que "será nivel igual o superior, porque en el Europeo el nivel ha sido muy alto", pero hoy, en la doble sesión de entrenamiento que tiene, ya nadará "para preparar a tope Roma y allí intentar estar en una final si se puede". Aunque reconoce que "todavía queda trabajar mucho en la piscina de 50".

Mireia sabe perfectamente lo que va a poner en la lista de Reyes: "Que el 2009 sea igual que este año o un poco mejor". Para ella "toda competición es un entrenamiento, cojes experiencia te salga bien o mal. Esto te hace crecer como nadadora", y de ello se valdrá para enfocar los Juegos Olímpicos de Londres: "Son dos mundos diferentes la piscina de 50 y la de 25, unos Juegos... hay mucha diferencia, pero ahora lo veo más cerca". Ella será la referencia.