Nacho Cano será investigado por la jueza que lleva el caso del novio de Ayuso y el asesinato de Borja Villacís

Nacho Cano ya tiene una jueza que investigue si cometió un delito al traer a España a 17 jóvenes mexicanos para trabajar en 'Malinche', el musical que el ex de Mecano tiene en Madrid desde finales de 2022. Se trata de Inmaculada Iglesias, titular del Juzgado de Instrucción Número 19 de Madrid. Se trata de la misma jueza que investiga a Alberto González Amador, pareja de Isabel Díaz Ayuso, por presuntos delitos fiscales y de falsedad documental, y a la que también recayeron las pesquisas por el asesinato de Borja Villacís, hermano de la exvicealcaldesa de Madrid.

El atestado policial ha llegado ya a manos de la magistrada, que ahora deberá acordar las primeras diligencias antes de decidir si ve indicios penales para seguir con la instrucción del asunto, señalan fuentes jurídicas.

La investigación intentará descubrir, además, si más allá del caso concreto de estos 17 jóvenes mexicanos esta práctica resulta un modus operandi habitual en la forma de trabajar de Nacho Cano. De ser así, y aunque los delitos todavía están por definir y los hechos por acotarse, el ex de Mecano podría enfrentarse a una pena de entre dos y cinco años de cárcel por el delito de favorecimiento de inmigración ilegal y de seis meses a seis años de cárcel por el delito contra los derechos de los trabajadores

La acusación

Detenido el pasado martes, y puesto en libertad apenas unas horas después, Nacho Cano dio una rueda de prensa ese mismo día para defenderse de los cargos de presunta contratación ilegal de inmigrantes por los que se le investiga actualmente. Todo se debe a los 17 jóvenes mexicanos que, según él, habría traído a España como becarios para que aprendiesen a interpretar 'Malinche', el musical que lleva en la cartelera madrileña desde septiembre de 2022, y pudiesen representarlo posteriormente en su país.

La investigación policial sostiene que los supuestos estudiantes fueron convencidos para hacerse pasar por turistas y atravesar la frontera. Una vez en suelo español, solicitaron un permiso de estudios que se les fue denegado por no tener la formación adecuada. Trabajaban, según apuntan las últimas informaciones, hasta diez horas al día a cambio de un salario mensual de 500 euros, la estancia en un hostal del centro de Madrid y, supuestamente, un almuerzo diario.

Los jóvenes denuncian a la Policía

El caso, sin embargo, parece que también parte de la denuncia de una de las jóvenes que el productor trajo desde México. Según explicó Cano durante la rueda de prensa del martes, el programa de becas comenzó hace un año. Una semana después, surgieron "problemas con una persona conflictiva" y se decidió que se apartara del programa.

"Se decide que esta persona se tiene que volver a México, se le pone billete y no quiere y amenaza con que va a denunciar. Pasa el tiempo, seguimos con el programa y hace dos semanas se presentan doce personas de la Policía con una inspectora de trabajo en la escuela donde se imparten clases", explicó el que fuera miembro de Mecano.