Benítez carga contra el Celta: "No quieren reconocer que tenía razón"

Rafa Benítez llegó hace un año a Vigo con la intención de devolver al conjunto celeste a las posiciones cerca de Europa, aunque para nada consiguió su objetivo inicial. A los nueve meses, el técnico madrileño fue destituido, después de no obtener los resultados esperados y estar situados tan solo dos puntos por encima del descenso.

Los fracasos de Benítez en España

El también exentrenador de Real Madrid y Liverpool ha valorado su paso por el Celta en el podcast 'Stick to football' y dejado más de un recado. "Honestamente, si ves todos los jugadores de los que se están deshaciendo, son exactamente los que yo dije, pero con otro técnico", algo que afirma haber vivido también en el Inter y que, según su opinión, lo hacen porque "no quieren reconocer que tenía razón".

Además, el español afirma poder competir "con cualquiera si tienes las herramientas necesarias". El principal problema, según el técnico, se encuentra en el fair play, que en España es "muy estricto" y que hace que sea "imposible" competir contra los grandes clubes de la liga. "El Real Madrid puede gastar 600 millones y el Celta 60".

Sobre sus planes de futuro, Benítez describió la hoja de ruta que tenía planificada desde antes de llegar al Celta. "Contrato de 3 años, tuve conversación con el presi. Campos era asesor externo así que podía traer jugadores del PSG. Podíamos acercarnos a Europa e ir a Europa en 2-3 años. Después, volver a Inglaterra".

Ofertas de múltiples países

En cuanto a ofertas, piensa en entrenar en la Premier y asegura que tuvo ofertas de cinco o seis equipos de la parte baja de la tabla. Pero se guía por la aspiración de poder competir. Añade que tuvo dos ofertas de Grecia, una de Turquía, una de Hungría, dos de México, una de Catar, dos de Arabia y una de Emiratos Árabes.

Benítez abandonó Vigo con un pobre historial de cinco victorias, nueve empates y 14 derrotas. El entrenador firmó un contrato para tres temporadas, a pesar de no llegar a completar ni una entera. La gota que colmó el vaso fue un partido en el Bernabéu, donde su equipo cayó por un contundente 4-0, dejando una imagen muy pobre.