Cristiano Ronaldo sella el pleno de victorias para la Juventus

Cristiano no falló a su cita con el gol

Cristiano no falló a su cita con el gol / EFE

Albert Gracia

La Juventus se llevó una cómoda victoria en su visita al Stadio Friuli. Los goles de Bentancur y Cristiano fueron suficientes para un equipo que hizo un partido muy completo y al que, paradójicamente, le faltó pegada y puntería arriba. 

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Serie A

0
2
Alineaciones
Udinese
Scuffet; Larsen, Troost-Ekong, Nuytinck, Samir; Behrami (Pussetto, 62'), Fofana, Mandragora; Barak (Teodorczyk, 75'), Lasagna (Vizeu, 86') y De Paul.
Juventus
Szczesny; Cancelo, Bonucci, Chiellini, Sandro; Bentancur, Pjanic (Barzagli, 89'), Matuidi (Can, 46'); Dybala (Bernardeschi, 66'), Mandzukic y Cristiano Ronaldo

La Juventus demostró su tremenda superioridad desde el arranque del encuentro. Los de Allegri pusieron en el verde todo su potencial y dominaron la posesión con suma facilidad. No obstante, las ocasiones tardaron en llegar. No fue hasta pasado el primer cuarto de hora de partido cuando la 'Vecchia Signora' se asomó a la meta de Scuffet.

Pjanic y Cristiano, que estuvo muy activo, lo probaron desde lejos. Pero fue Bentancur, que era la gran sorpresa en el once, el que puso la justicia en el marcador. El uruguayo aprovechó un centro medido de Cancelo para batir sin problemas al meta del Udinese con un cabezazo picado. La Juventus, lejos de conservar el resultado siguió apretando arriba.

Y apareció la figura de Cristiano. El portugués aprovechó un pase de Mandzukic para fusilar a Scuffet con un zapatazo cruzado. El luso ponía el 2-0 en el marcador y rubricaba un primer tiempo en el que la Juventus fue muy superior. 

En la reanudación la 'Vecchia Signora' fue a más. El Udinese también trató de espabilar. Lasagna, solo y con Szczesny totalmente vencido, tuvo la ocasión más clara para recortar distancias. Pero en ningún momento consiguió meterse en el partido ni incomodó a un cuadro de Allegri que se sentía muy seguro. La Juventus tuvo oportunidades muy claras para lograr un marcador más abultado pero Scuffet se erigió como un muro infranqueable e hizo que su equipo no se llevara una goleada sonrojante