Terzic, el ojeador que 'ayudó' a reinar a Klopp y ahora tiene a tiro su trono

Jürgen Klopp fue el último en escribir con tinta y en mayúsculas en el libro de historia del Borussia Dortmund. Lo hizo en las temporadas 10-11 y 11-12, cuando el ya carismático técnico germano construyó un señor equipo capaz de tumbar a todo un Bayern de Múnich y conquistar, por dos temporadas consecutivas, el título de la Bundesliga.

Pero aquel equipo poco tiempo iba a permanecer unido. La fuga de talento que siempre ha caracterizado al club de la cuenca del Ruhr hizo estragos, Klopp se marchó (2015) en dirección Liverpool y el Dortmund, desde entonces, jamás volvió a recuperar el dominio en el fútbol alemán. Un par de DFB Pokal y una Supercopa alemana es el palmarés desde entonces.

Hasta hoy, cuando el club 'borusser' lo tiene todo de cara para volver a ser el rey en Alemania. Más de una década después, está a solo cinco partidos de proclamarse campeón. Cinco victorias. Los Bellingham, Moukoko, Schlotterbeck y compañía quieren ser el relevo de los Hummels, Gündogan y Lewandowski... Igual que Terzic quiere ser el de Jürgen Klopp. Pero la historia entre Terzic y el Dortmund no ha nacido este año. Ni siquiera en 2020, cuando se puso al frente del equipo como técnico interino durante unos meses hasta la llegada de Marco Rose.

Un hombre de club

Su relación con el club 'borusser' viene de más lejos. Criado en la región a solo 30 kilómetros de Dortmund, empezó a acudir como aficionado al Signal Iduna Park con apenas nueve años, aunque no fue hasta el 2010 cuando el joven Terzic empezó a trabajar como ojeador tras no triunfar como jugador.

"Estudié para obtener mi licencia A de la UEFA y conocí al jefe de cazatalentos del Borussia Dortmund, y un par de meses después me llamó y me ofreció un trabajo. En 2010 dejé de jugar y comencé a ser entrenador en el Dortmund", reveló el técnico 'borusser'.

Entre 2010 y 2013, en los mejores años del Dortmund de Klopp, combinó sus tareas como 'scouter' del primer equipo con las de asistente en las categorías inferiores del club, hasta que recibió la llamada de Slaven Bilic y emprendió un nuevo rumbo como segundo entrenador. De la mano del técnico croata, al que había ayudado ya con algún informe de rivales, se marchó al Besiktas (2013-2015) y al West Ham (2015-2017). Cogió experiencia, se fogueó más cerca de la figura de un primer entrenador y en 2017 volvió a casa.

De vuelta a casa

Entró en el staff técnico de Lucien Favre en la campaña 2017-2018, hasta que en diciembre de 2020 cumplió su primer sueño: ser el primer entrenador del Borussia Dortmund. Hasta julio de 2021, cuando Marco Rose recogió el testigo, Terzic logró levantar uno de los pocos trofeos que ha conquistado el Dortmund en la última década: la DFB Pokal 20-21.

El Dortmund inició entonces un nuevo proyecto, con Rose a los mandos, y agradeció el trabajo realizado por Terzic nombrándole secretario técnico. Pero el cargo le iba a durar bien poco. Marco Rose no cumplió las expectativas de la dirección deportiva la campaña pasada y, este mismo verano, Edin volvió al banquillo del Dortmund. Esta vez parece que de forma definitiva. Tiene contrato hasta 2025 y una Bundesliga a tiro como entrenador. Es queridísimo en el vestuario, los resultados le avalan y el trono de Klopp está ahí a tiro. Es el heredero. Un hombre de club.