El United nunca olvida su historia

La final de la Champions será el duelo entre los dos mejores equipos del momento: Barça y Manchester United. Dos equipos con un gran presente, un futuro prometedor y un pasado digno de recordar.

Miquel Soria

Aquí nos proponemos hacer un breve repaso a la historia del Manchester United, el club de los Busby Babes, de Alex Ferguson, de Old Trafford y de la mítica Copa de Europa del 68, pero también de la tragedia aérea de Múnich, sin duda, el momento más triste, y de muchos otros malos momentos. Una historia llena de altos y bajos que ha forjado al club que conocemos hoy en día.

Newton Heath

Nacido en 1878, el club fue fundado por un grupo de trabajadores ferroviarios de la región del Lancashire con el nombre de Newton Heath. Los colores eran el verde y el dorado y eran tiempos en los que el humilda campo de Monsall no tenía ni gradas ni vestuarios.

Fueron tiempos difíciles, en los que el club pasaba problemas tanto en lo deportivo como especialmente en lo económico, con una importante deuda que obligó a buscar desesperadamente un salvador. Fue entonces cuando apareció un ex jugador del club, Henry Stafford, quien solventó los problemas y, desde la presidencia, adoptó los símbolos que siguen vigentes hoy en día: el color rojo de la equipación y el nombre actual: Manchester United.

A partir de ahí llegaron los primeros éxitos del club, con las primeras ligas y copas de su historia en 1908 y 1909, lo que metió al United en la élite del fútbol británico. Sin embargo, después de esas alegrías, los años posteriores no fueron nada fáciles. Hubo escándalos por culpa del amaño de partidos, el equipo no respondía en lo deportivo y, para colmo, la crisis económica volvía a irrumpir dejando al equipo casi en la bancarrota.

Era 1931 y tuvo que ser otro millonario de la época, James Gibson, quién volviera a dar un impulso decisivo para que, esta vez sí, el equipo se asentara entre los mejores de Inglaterra… hasta que apareció la II Guerra Mundial.

Los Busby Babes y la tragedia de Múnich

El ejército alemán bombardeó Old Trafford y el United tuvo que jugar en el exilio de Maine Road. Fueron años duros hasta que llegó el que sería uno de los grandes mitos del club: Sir Matt Busby.

El técnico forjó un equipo increíble, con jugadores como el capitán Johnny Carey o los jóvenes Duncan Edwards y Bobby Charlton. Fue el inicio de los famosos Busby Babes, que arrasaron en Inglaterra y que llegaron en dos ocasiones a las semifinales de la Copa de Europa.

Sin embargo, la historia volvió a jugársela al United en 1958. El destino quiso que el avión que transportaba al equipo desde Belgrado hacia las Islas se precipitara en Múnich. Fallecieron siete jugadores en el accidente y poco después lo haría Duncan Edwards, la estrella del equipo.

El accidente aéreo marcó un antes y un después en el Manchester United, afectado tras la tragedia. Sin embargo, el club de Old Trafford consiguió volver a levantarse. Lo hizo de la mano de dos de los supervivientes: Matt Busby y Bobby Charlton, y con la llegada de un joven galés llamado George Best, tal vez la primera gran estrella del mundo del fútbol a nivel mediático.

Best llegó en 1961, poco antes de que Busby recompusiera el equipo con otros grandes jugadores como Dennis Law o John Connely. El United volvía a mandar en Inglaterra conquistando las ligas del 65 y el 67, pero aún tenía ante sí el primer gran reto de su historia: la Copa de Europa.

Diez años después de la tragedia aérea, en 1968, el United derrotó al histórico Benfica de Eusebio en la final y conquistó su primera Copa de Europa. Era además la primera que iba a parar a las vitrinas de un equipo inglés. Tenía que ser el Manchester United.

Sir Alex Ferguson

A partir de ahí, el equipo fue decayendo y no volvió a levantar cabeza hasta que llegara a Old Trafford un tal Alex Ferguson. Era 1986 y el técnico escocés había hecho historia en el Aberdeen conquistando una Recopa. Sin embargo, sus primeros años no fueron nada buenos y a punto estuvo de ser destituido. Nadie hubiera dicho por aquél entonces que, 23 años después, aún seguiría en el banquillo del United.

El equipo se quedó lejos del liderato en su primera temporada, pero poco a poco fue mejorando y en el 1990 conquistó su primera Copa, lo que le permitió ganar al año siguiente la Recopa frente al Barça de Cruyff.

La llegada de hombres como Cantona, Schmeichel o Keane reforzó al equipo y junto con unos jóvenes hermanos Neville, Bechkam, Scholes o Giggs cuando el United dio lo mejor de sí, tanto en Inglaterra, -donde mandó en la última década del siglo XX-, como en Europa, logrando en 1999 su segunda Copa de Europa. Un año en el que también cayeron Premier y FA Cup para el United, en lo que se convirtió en el primer y único triplete de la historia del club.

Los éxitos se mantuvieron un par de temporadas más, pero los cambios a nivel directivo, con la llegada del norteamericano Glazer y la marcha del club de emblemas como Beckham o Keane, hizo que el United se resintiera.

Cuestionaron a Ferguson, pero el escocés fue de nuevo capaz de armar un bloque sólido, en el que se combinaron bien la juventud de Cristiano Ronaldo o Rooney con la veteranía de jugadores como Giggs o Scholes. De esta manera, los éxitos volvieron a llegar y el United pudo conquistar su tercera Champions en la final de Moscú ante el Chelsea.

Este año han caído la Premier, la Carling Cup y el Mundial de Clubes y ahora el United tiene la oportunidad de repetir título, algo que nadie logra desde que lo hiciera el histórico Milan de Rijkaard, Gullit o Baresi. Delante estará también un histórico Barça. Que gane el mejor.