Sergio: Busisolutions II

Su padre Carlos fue un precursor y dio pie a la mítica imitación del 'Força Barça' que ya ha quedado para la historia

El Dream Team pasó a la historia por sus títulos, su estilo de juego y la revolución que propuso en el mundo del fútbol. Coincidiendo con la norma que impedía a los porteros recoger el balón con las manos tras una cesión de un compañero, Johan Cruyff apostó como recambio de Zubizarreta por un portero que rompía moldes. Carlos Busquets fue un precursor del juego con los pies del guardameta, enfundado con su chándal largo, y no dejaba a nadie indiferente.

Su estilo inspiró a Alfonso Arús para parodiarle a través de su mítico programa 'Força Barça' y sacarse de la manga las ocurrentes 'Busisolutions'. Una década después su heredero ha saltado a escena en versión de jugador de campo con una calidad y descaro que no dejan de sorprender. Sergio ha necesitado muy pocos partidos para consolidarse en el primer equipo, marcar su primer gol en la Champions y llegar a la internacionalidad sub'21.

Su meteórica progresión, sin embargo, no ha cambiado su vida. Sergio sigue viviendo en Cerdanyola con sus padres, pero cada vez que disfruta de tiempo libre recorre la corta distancia que le separa de Ciutat Badia para visitar a sus amigos de infancia. Busquets se crió en este humilde enclave del Vallès, donde empezó a dar las primeras patadas al balón antes de pasar al Benjamín del Barberà.

El fichaje de su padre por el Lleida le llevó al Cadete B del conjunto del Segrià. Posteriormente se incorporó al Jábac de Terrassa y ya como Juvenil de segundo año (16 años) fichó por el Barça. Sergio Lobera y Alex García fueron sus técnicos en categorías inferiores hasta que se puso a las órdenes de Pep Guardiola la temporada pasada en el segundo equipo barcelonista.

En su etapa de formación coincidió con Bojan, Giovani dos Santos, Víctor Sánchez o Marc Crosas y guarda grandes recuerdos como la Liga ganada con el juvenil en la última jornada en un mano a mano con el Espanyol o la Copa conquista en Los Pajaritos, con un gol suyo, frente al Zaragoza.

El colofón llegó el año pasado con el ascenso con el Barça Atlètic.Guardiola vio en Busquets a un valor potencial para el primer equipo y se lo llevó al stage de Escocia. Aunque empezó la temporada a las órdenes de Luis Enrique, quien incluso le sentó en el banquillo ante la Gramenet, pronto se integró en el vestuario del primer equipo, sentado al lado de las taquillas de Pedro y Víctor Sánchez. Recientemente, en una conferencia en Badia, admitió que Figo era su ídolo de infancia pero ahora sus referencias son Xavi y Touré.

Sergio es un apasionado del fútbol y del deporte. Le encantan el baloncesto, ya espera la oportunidad de ir esta temporada al Palau, el tenis, la Fórmula 1 o el motociclismo. También tiene a punto la PSP para evitar el aburrimiento.

Ante todo, el jugador del Barça es alguien muy familiar y la mejor muestra es la dedicatoria en árabe que lleva tatuada en su brazo izquierdo y que besó al marcar el gol en Basilea. Una de las personas que más le marcó fue su abuelo materno, Juan Burgos, a quien también le dedicó el tanto señalando el cielo. Juan le enseñó a amar al fútbol y contribuyó a que su nieto se haya convertido en un modelo a seguir para los jóvenes valores de La Masia que sueñan con ser estrellas del Camp Nou.