¿Quién es Sánchez Martínez, el árbitro que pitará el Clásico?

José María Sánchez Martínez será el encargado de dirigir el Clásico del próximo domingo entre Real Madrid y Barcelona (16:15 horas, DAZN).

En principio, el colegiado murciano es toda una garantía para encargarse del partido más importante de la temporada en LaLiga Santander, donde todas las miradas estarán concentradas con lupa en su actuación. Sánchez Martínez, conocido en el mundillo arbitral como "Manolete" por su parecido con el legendario torero, es el número 1 del arbitraje español.

Nacido en la localidad de Lorca el 3 de octubre de 1983 -acaba de cumplir los 39 años-, Sánchez Martínez llegó a Primera división en el verano de 2015, debutando en la máxima categoría con un Real Sociedad - Sporting de Gijón. Es internacional desde 2017.

Con el del domingo, Sánchez Martínez habrá arbitrado ya seis clásicos, lo que le convierte en un experto a la hora de lidiar con uno de los 'Miuras' más importantes del planeta fútbol.

Hasta ahora su balance es de dos victorias para el Real Madrid y tres para el FC Barcelona, si bien desde el barcelonismo se le recuerda en un Clásico no sobre el césped, sino desde la sala VAR donde indicó como penalti un leve agarrón de Lenglet a Sergio Ramos en un encuentro disputado en el Camp Nou.

También está en la historia de los enfrentamientos entre culers y merengues ya que fue el primer árbitro que indicó, ahora sí en el campo, un penalti señalado desde el videoarbitraje, de Varane a Luis Suárez, en un Clásico que acabó con un contundente 5-1 a favor del Barça.

Más polémico es el árbitro que estará en la sala VAR, el canario Alejandro Hernández Hernández. Nacido en Arrecife, capital de la isla de Lanzarote, a sus 39 años es colegiado de Primera desde 2012 e internacional desde 2014.

Hernández Hernández tiene un amplio historial de polémicas en los Clásicos que ha pitado. El Barça se quejó en su momento de varias acciones de Sergio Ramos, Marcelo o Bale donde el isleño se mostró muy condescendiente, viéndose en varias ocasiones superado por la trascendencia del encuentro, si bien para el aficionado culer siempre será el colegiado que no supo ver un gol de Luis Suárez que entró prácticamente un metro en la portería del Benito Villamarín en un Betis-Barça jugado en enero de 2017.