Solo una roja en Anfield impediría a un jugador del Barça estar en la final de Champions

Evitar la expulsión, ya sea por doble amarilla o directa, es otro de los grandes objetivos junto a la clasificación para la final del Fútbol Club Barcelona mañana en Anfield ante el Liverpool pensando en la cita del Metropolitano del 1 de junio. Sólo en ese caso, de ver la tarjeta roja en el estadio de los “reds”, cualquier jugador azulgrana se perdería una hipotética final de la gran competición continental. Nunca una amonestación va a privar a cualquier de los once jugadores que decida poner mañana Valverde en el césped o aquellos que salgan desde el banquillo, acudir a la gran cita en la capital de España del primer día del mes de junio.

Es la quinta temporada donde está en vigor está modificación según la cual se eliminan todas las tarjetas amarillas mostradas hasta cuartos de final. Se trata de un cambio normativo que impuso la UEFA a raíz de lo sucedido con el madridista Xabi Alonso en la temporada 2013-2014. . El jugador vasco se perdió la final  de Lisboa ante el Atlético de Madrid después de ver la tarjeta amarilla en el partido de vuelta de semifinales de ante el Bayer de Munich en el Allianz Arena. Entonces suponía su tercera amonestación, teniendo que cumplir ciclo en la gran final de Lisboa.

Desde la temporada 2014-2015 esto cambió en el reglamento de la UEFA. La clave radica en el artículo 49 del Reglamento de la Liga de Campeones. En su punto dos deja claro que un jugador es suspendido cuando suma “tres amonestaciones en tres diferentes encuentros” y además a partir de la quinta esta situación se reduce a sólo dos encuentros.

Pero excepcionalmente, y como recoge el punto cuatro del mismo artículo, “todas las tarjetas amarillas pendientes expiran cuando se pasa de la fase de grupos a las  eliminatorias y lo mismo sucede cuando se pasa para semifinales”. Así pues el objetivo prioritario del Fútbol Club Barcelona de clasificarse para la final de la Liga de Campeones debe ir acompañado de que ningún azulgrana viera la tarjeta roja. Sólo esto le evitaría perderse la gran final al margen de la sanción que le pueda imponer la Comisión de Ética y Disciplina de UEFA que tiene prevista su reunión el próximo 16 de mayo, una vez finalicen las semifinales de la Liga de Campeones y la Liga Europa. Por cierto que la acumulación de tarjetas si se tiene en cuenta de cara a la próxima temporada en la Liga de Campeones, no así en la Liga Europa.