Los 'reds' cavaron la tumba de un sentenciado Weisweiler

Barça y Liverpool vivirán en los próximos días su cuarto enfrentamiento en competición continental. Son dos clásicos del fútbol europeo pero su primer choque no llegó hasta la Copa de la UEFA 1975-76.

Eran tiempos convulsos para el Barça, que estaba inmerso en una guerra sin cuartel entre la estrella del equipo, Johan Cruyff y Hennes Weisweiler, el prestigioso técnico que había hecho grande al Moenchengladbach y al que había elegido Agustí Montal para sustituir a Marinus Michels. El alemán se había propuesto renovar al equipo y había dado entrada a varios futbolístas jóvenes, marginando a varios veteranos. Sus métodos chocaban radicalmente con el 'Flaco' y el rendimiento del equipo se resentía.

La afición del Barça había tomado partido, mayoritariamente por el capitán -hubo incluso, manifestaciones- y tras una derrota en Las Palmas, que dejó al equipo a seis puntos del Madrid, la situación se hizo insostenible. Llegó, en aquel punto, el partido de ida de las semifinales de la Copa de la UEFA ante el Liverpool. Era la única tabla de salvación que le quedaba al técnico renano. Pero, en la ida, en el Camp Nou, los 'reds' dieron buena cuenta del Barça. Ganaron 0-1 gracias a un tanto de John Benjamin Toshack y la diferencia no fue mayor porque Mora realizó grandes intervenciones. El semanario RB señaló, tras el partido, que 'el Barça era un equipo en descomposición".

Tres días después, llegaba lo inevitable. Montal cesaba a Weisweiler y se hacía cargo del equipo Laureano Ruiz, el técnico que había llevado al equipo juvenil a sus mejores éxitos. Paco Rodri ejercería de segundo.

Con ellos, afrontó el Barça el partido de vuelta y puso en serios aprietos al Liverpool. Creó varias ocasiones de gol pero no pudo pasar del empate a uno. El público de Anfield despidió a los blaugrana con una ovación. Fue una digna despedida.

Derrota blaugrana en el único amistoso

Sólo una vez se han enfrentado Barça y Liverpool fuera de competición oficial. Fue en el Torneo de Amsterdam de 1977, en el que se conmemoraba el 702 aniversario de la fundación de la capital holandesa.

El equipo catalán venía de hacer uno de los ridículos más espantosos de su historia puesto que el Hamburgo le había humillado en el Volksparstadion con un increible 6-0.

Y en la semifinal de Amsterdam -con Cruyff ausente por lesión- casi, casi se repite el resultado. El novel AZ'67 Alkmaar, revelación de la anterior Liga holandesa no pudo pasar del 4-0... y la prensa no dudó en califacar al Barça como 'el auténtico hazmerreir de Europa'. En el banquillo estaba Marinus Michels, que había vuelto al club un año antes. Comenzaba su última temporada. Y también la de Cruyff y Agustí Montal.

En la otra semifinal, el anfitrión Ajax se deshizo de los 'reds' por 2-1 y, así, después de dieciséis meses volvían a enfrentarse ingleses y catalanes.

No hubo frialdad en la consolación ya que se disputó antes de la final. Había 60.000 espectadores en las gradas, varios miles de ellos ingleses, bandas musicales y hasta paracaidistas.

El técnico bávaro introdujo tres cambios con respecto al equipo que había sido ridiculizado en la semifinal. Mora, Costas y Rexach sustituyeron a Artola, Ramos y 'Milonguita' Heredia. Hubo cierta mejoría con respecto al encuentro anterior pero el Liverpool, más rodado, se impuso con un tanto de Johnson. Por cierto que 'Mister Mármol' situó a Charly de ariete.Se dijo que era para quemarle...