¿Cómo rebajó el Barça la masa salarial para poder inscribir?

El club tuvo que bajar el sueldo a los capitanes, renovó a Umtiti para diferir pagos y directivos avalaron personalmente

La gran reducción de esta temporada es gracias a las salidas de los que más cobraban

Laporta habla sobre la situación del fair play financiero del Barça

Laporta habla sobre la situación del fair play financiero del Barça / DAVID BERNABEU

Sergi de Juan

Sergi de Juan

Como ya informamos en el diario SPORT, la masa salarial actual del FC Barcelona está cifrada en 530 millones de euros. Y se cuentan los 90 millones que cuestan los deportistas de todas las secciones profesionales y unos 50 de los jugadores cedidos que vuelven al club y que deberán buscarse un nuevo destino porque se sigue sin contar con ellos.

Se ha hecho un trabajo ingente para bajar el compromiso de pago en salarios pues cuando la directiva de Laporta llegó al poder la coste de su plantilla de deportistas era de 616 millones de euros, 510 de ellos correspondientes solo al primer equipo de futbol.

La gran reducción para esta temporada se debe, sobre todo, al adiós de los capitanes, los jugadores que cobraban más de la plantilla, y de Antoine Griezmann, otro con una ficha prohibitiva, y Memphis Depay en el mercado de invierno. También se ha acabado de liquidar los compromisos adquiridos por el club azulgrana con sus deportistas durante la pandemia del coronavirus.

El objetivo del FC Barcelona es seguir reduciendo la masa salarial esta temporada como reconoció Joan Laporta ante los Senadores y el reto es dejarla alrededor de entre 450 y 470 millones de euros. Tienen todavía todo el mercado por delante.

Movimientos imaginativos

La situación del verano pasado era peor y eso obligó a la dirección deportiva liderada por Mateu Alemany a buscar fórmulas imaginativas para encontrar solución al problema de no poder inscribir a los nuevos jugadores.

El club hizo un esfuerzo y vinieron muchos futbolistas, algunos a un coste elevado, gracias a que se activaron las famosas cuatro palancas, que no es otra cosa que vender un porcentaje de un activo e hipotecar ingresos futuros para tener dinero suficiente. La apuesta, arriesgada, salió bien y el Barça pudo hacer una plantilla competitiva que esta temporada ha ganado la Liga.

Pero el problema para inscribir a jugadores se remonta al verano de 2021. En ese momento, ya se tuvieron que hacer malabares para poder registrar los fichajes. Casi al límite de empezar la Liga, el Barça pudo inscribir a Memphis Depay, Eric García y Rey Manaj gracias a una rebaja muy importante en el sueldo de Gerard Piqué. El club quiso agradecérselo públicamente en el comunicado oficial.

Memphis y Piqué celebrando el gol

Memphis y Piqué celebrando el gol / Pau Barrena

Más imaginativo fue lo que se hizo para poder inscribir a Ferran Torres en el mercado de invierno de 2022. El club azulgrana consiguió fairplay suficiente cediendo Coutinho al Aston Villa y, en un movimiento que nadie esperaba, renovando el contrato de Umtiti hasta 2026.

El francés se rebajó un 10% el total de la ficha que debía ingresar en el año y medio de contrato que le restaba hasta 2023, además de aceptar incluir variables. Y ese 90% que sí que debía recibir quedó dividido en los cuatro años y medio de contrato que firmó en ese momento. Una idea que ayudó al Barça en ese momento y que también juega a favor que muchos más equipos ahora puedan afrontar su fichaje.

Aval de directivos

Otra idea que se utilizó para poder inscribir jugadores fue que algunos directivos avalaran con dinero de su bolsillo. La temporada pasada el presidente Joan Laporta y el tesorero Ferran Olivé avalaron personalmente once millones de euros. Eso permitió poder inscribir a Jules Koundé en la Liga.

Laporta y Koundé, en la Ciutat Esportiva

Laporta y Koundé, en la Ciutat Esportiva / David Ramirez

El club azulgrana, si fuera necesario, optará por repetir la fórmula en el hipotético caso que haya problemas de última hora con la inscripción de algún nuevo fichaje. La idea del FC Barcelona es que con la reducción de la masa salarial por vías normales, ventas de jugadores, se pueda conseguir el objetivo pero no se descartan movimientos 'anormales' si la situación lo requiere.

Se han hecho auténticos malabarismos en el pasado y el club está preparado por si toca hacerlos en el futuro. Mateu Alemany y su equipo así como la junta directiva están dispuestos a jugar fuerte.