Punto y seguido al 'caso Faye', que sigue muy abierto

Pasado el 30 de junio, el Barça vuelve a su posición de fuerza: Flick quiere verle en pretemporada

Los problemas económicos del Porto frustran, de momento, un posible acuerdo entre clubes

El golazo de Mika Faye con Senegal

El golazo de Mika Faye con Senegal / SPORT.es

Toni Juanmartí

Toni Juanmartí

El futuro de Mika Faye sigue siendo una incógnita. El central senegalés está de vacaciones a la espera de que se resuelva su futuro, algo que no parece inminente. Pasado el 30 de junio, el Barça ha vuelto a su posición de fuerza inicial: Flick quiere verle en pretemporada. Además, los contactos con el Porto -y otros clubes- no cesan pero el hecho de que los portugueses no alcanzaran los 15 millones que exigía el club catalán imposibilitó el acuerdo antes del 1 de julio.

Aunque el Barça siempre ha trasladado a Faye que cuenta con él, los tempos de la entidad parecen ser más lentos que los del jugador, que considera que se ha ganado a pulso su derecho a tener minutos en el primer equipo. De hecho, el entorno del africano ya acabó molesto el curso al entender que el zaguero había merecido al menos el debut a las órdenes de Xavi.

Así las cosas, la postura del jugador de cara al próximo curso era -y es- muy clara: o tiene ciertas garantías de que podrá ir entrando con Hansi Flick o prefiere optar por una salida. Sin embargo, el Barça no puede prometerle cuestiones que dependen únicamente del entrenador. Además, el 'overbooking' en el centro de la zaga provoca que Faye desconfíe de su rol en la confección final de la plantilla.

Mika no quiere jugar de lateral

Ante tal escenario, en el Barça le han trasladado que incluso le van capaz de ejercer en el lateral izquierdo, donde sería la alternativa a Balde. Sin embargo, dicha opción no es del agrado del jugador, que se considera central y quiere jugar solo en el centro de la defensa.

Respecto al tema del Porto, a la entidad que preside Joan Laporta le podía haber interesado cerrar un traspaso antes del 30 de junio siempre que se hubieran dado unos condicionantes que no se han dado. Por un lado, una cantidad económica mínima. Por otro, una cláusula de recompra. El conjunto luso no podía llegar a los 15 millones que exigía el Barça, por lo que la operación en ningún momento estuvo cerca de completarse a pesar de que entre Porto y jugador sí se dieron avances significativos. Este parón no quita, sin embargo, que ambos clubes sigan en contacto.

Un desenlace que no será inminente

Faye iniciará la pretemporada el próximo día 10 de julio a las órdenes de Flick. Conforme avance el verano habrá que ver qué propuestas llegan, qué margen tiene el Porto, cómo quedan los casos de jugadores como Íñigo Martínez o Eric y si hay o no ventas inesperadas. De todo esto, además del rendimiento del propio Mika, dependerá que el central forme o no parte del Barça la próxima temporada.

Lo que sí está claro es que la postura del jugador no ha variado: si no va a tener minutos con cierta regularidad, prefiere salir. Por su parte, el Barça se siente fuerte porque Faye tiene contrato hasta 2027. El caso sigue encallado.