Pep Marí: "Si Ansu Fati pasa de ser un jugador a ser un personaje, la cagaremos"

Pep Marí habla con pasión de su libro y de psicología en el deporte

Pep Marí habla con pasión de su libro y de psicología en el deporte / JAVI FERRÁNDIZ

Àngels Fàbregues

Àngels Fàbregues

Pep Marí es un apasionado de la psicología, la vive intensamente sobre todo en el ámbito deportivo. Estuvo 28 años dirigiendo el departamento de psicología del CAR de Sant Cugat donde ayudó a centenares de deportistas a superar sus miedos, sus errores o sus puntos débiles. Un buen día decidió volar hacia otros objetivos más motivantes, entre ellos escribir. Ahora ha publicado ‘Equipos campeones’, una guía para todos los equipos en busca de mejora.  

¿Cómo son los equipos campeones?

Son diferentes a los demás. Funcionan con otras reglas del juego. El sentimiento predominante entre los integrantes de un buen equipo es el respeto, mientras que los miembros de los grandes equipos se admiran. Como este ejemplo hay otros diez que explico en mi libro ‘Equipos campeones’.

¿Funciona igual en equipos amateurs que en profesionales?

Sí. Yo he trabajado con futbolistas de todos los niveles, desde niños hasta futbolistas profesionales y les pasa lo mismo pero cuantitativamente hablando es diferente. No es lo mismo ser portero del Barça que ser el portero del equipo del barrio por la presión, pero el portero del equipo del barrio quizás a nivel personal puede sentir la misma presión que el portero del Barça. 

Así, tu libro ‘Equipos Campeones’ sirve para todos

Se puede aplicar a cualquier equipo. Hablar de un gran equipo no es hablar del rendimiento en términos absolutos. Para llegar a ser el mejor equipo que uno pueda ser hay que aplicar las mismas reglas que para ser el mejor equipo del mundo. Las reglas del juego son las mismas, servirán para llegar a tu mejor versión y si con ella puedes ser campeón del mundo pues perfecto. 

Todos tenemos un rol, un trabajo, una contribución pero siempre destinado a hacer lucir al equipo

¿Cómo se gestiona un equipo con muchas estrellas?

Lo primero que hay que tener claro es no querer ser el mejor del equipo, sino ser el mejor para el equipo. La prioridad es el equipo. La primera cuestión que hay que gestionar es que todos tenemos un rol, un trabajo, una contribución pero siempre destinado a hacer lucir al equipo. Anteponer el interés colectivo por encima de individual. Decirlo es muy fácil pero hacerlo es muy difícil.

¿Y cómo se consigue?

Uno de los entrenadores que más me ha enseñado es Phil Jackson, entrenador de la NBA. Dice que la manera de crear un equipo ganador es creando algo superior al ego, que vaya más allá de los intereses particulares. Nombra a esta entidad superior como ‘la belleza del sistema’. Es lo siguiente: Es tan guapo jugar en el Barça, pasan cosas tan extraordinarias que quiero jugar allí para poder sentir esto. No para ser Messi, no para ser Piqué…  sino para poder sentir la belleza del sistema, donde todo va fluido, el engranaje es perfecto, es por eso que quiero pertenecer a este equipo.

A veces la motivación no viene tanto por marcarte un objetivo superior sino para seguir sintiendo este sentimiento de pertenencia

Esto ya existe en el Barça

Sí, cuando me preguntan cómo encuentra la motivación Messi, que lo ha ganado todo, respondo: A veces la motivación no viene tanto por marcarte un objetivo superior sino para seguir sintiendo este sentimiento de pertenencia. Yo quiero seguir sintiéndome parte de todo esto. El solo hecho de sentirme parte de un equipo que está haciendo historia ya motiva lo bastante para seguir trabajando con ilusión.

¿En un equipo de estrellas el entrenador acaba siendo un gestor de emociones?

Uno de los capítulos de mi libro es el tema del liderazgo. Cito un documental que me marcó mucho: ‘Take the ball, pass the ball’ producido por Marc Guillén. Al final sale Guardiola y explica que cuando tienes a jugadores tan buenos, tienes que hacer poca cosa, y que incluso alguno de los roles se asignaron solos, de manera natural y espontánea. En los buenos equipos el entrenador es quien asigna los roles, pero en los grandes equipos los roles se asignan prácticamente de forma natural. Solo hay que trabajar la gestión de las emociones. 

¿Qué tiene de diferente Messi?

Ve soluciones que otros como mínimo no ven tan rápido. En el deporte de alto rendimiento el cuándo es decisivo. En otro libro puse que el talento de Messi consiste en imaginar rápido ahora añadiría y en reaccionar rápido. Una de las mejores cosas que tiene es que es capaz de visualizar soluciones que los demás no ven y tiene la técnica y la capacidad de reacción para aplicarlas. 

Tengo una frase en mi primer libro inspirada en Messi que dice: ambición + orden + humildad = progreso

¿Qué podemos aprender de jugadores como Messi?

La humildad. Tengo una frase en mi primer libro inspirada en Messi que dice: ambición + orden + humildad = progreso.  Ambición en el sentido de valentía, un punto de locura. Orden en el estilo de vida. Messi seguro que cuando acaba el entreno está deseando llegar a casa para estar con sus hijos y no liarla parda. Humildad es que cada día parto de cero, puedo aprender de todo el mundo. El alto rendimiento no es solo entrenar seis horas al día sino un estilo de vida, vivir de una manera que prioriza la preparación a ser famoso o ganar dinero.

¿Cómo se explica que se repitiera lo de Roma en Liverpool?

En los JJOO de Barcelona conocí a la psicóloga del equipo de atletismo de EEUU que llevaba a gente como Mike Powell, Carl Lewis. Me dijo que lo que trabajaba con ellos era que cuando salieran a la pista nada les sorprendiera. Prevenir y entrenar las posibles sorpresas,  reproducir la situación en el entrenamiento. El Barça no previó que pudiera aparecer el fantasma de Roma, ni, lógicamente, habían entrenado qué hacer si pasaba, así que les pilló en bragas, no supieron reaccionar y se bloquearon.

Ansu Fati es un talentoso, alguien que tiene un don para aprender

¿Quién es Ansu Fati?

Un talentoso, alguien que tiene un don para aprender. Se puede saltar fases del aprendizaje. Tiene un talento fuera de lo normal que lo combina con la juventud, con el descaro, el atrevimiento… tiene mucho margen de mejora e incluso de error. 

Pero tiene muchos peligros

El entorno es vital. El peligro de Ansu Fati es que desde que se levanta hasta que se va a dormir todo el entorno le transmite que es la hostia. Si todo el mundo te lo dice te lo acabas creyendo y dejas de trabajar porque piensas que eres el mejor. Si pasa de ser un jugador a un personaje o un producto de marketing la cagaremos. Perderá de vista la prioridad que es trabajar como un cabrón para ser mejor cada día.