Messi: vuelve el 'gran capitán' en el Argentina-Brasil

Leo Messi con Medel en el Argentina-Chile de la Copa América 2019

Leo Messi con Medel en el Argentina-Chile de la Copa América 2019 / sport

Vero Brunati

Vero Brunati

"Messi puede jugar en cualquier posición de mitad de campo en adelante. Y si quisiera podría jugar en la mía. Le veo más de armador de juego que de definidor”. La frase es de Xavi Hernández. La dijo hace algo más de un año y cada partido que pasa se va acercando más a la realidad.

El capitán del Barça retorna a la selección argentina una vez cumplida la sanción por las duras críticas hechas a la Conmebol tras el Brasil-Argentina de Copa América. Y lo hace para reasumir un rol que ya tuvo su primera prueba durante esa competición: ser el líder futbolístico y moral del cambio generacional que está viviendo la albiceleste.

Messi crece

Lionel Messi ha crecido, ha cambiado, se ha hecho mentalmente mayor. Y lo hace notar en cada paso que da, en cada declaración, en el papel que asume en el vestuario y también en sus movimientos en el campo. “Es el director de la orquesta del Barcelona, el que marca los ritmos de juego”, sentencia César Luis Menotti, que lo disfruta como espectador, pero que también lo mira con el ojo crítico de quien es Director General de Selecciones Nacionales en Argentina.

“Este Messi maduro es muy importante para los jóvenes de la selección. Es un líder que se toma su tiempo para explicarles a sus compañeros cómo jugar mejor, un líder solidario por el bien equipo por encima de todas las cosas, incluso sobre él mismo”, dice el Flaco. Sus palabras alcanzan un enorme significado en la Argentina, donde el mejor futbolista siempre ha sido mirado de reojo.

Si bien menos dolorosa que otras, la caída ante Brasil en la Copa América de este año le agregó una mancha más a su difícil relación con la hinchada argentina, que le exige algún título grande para garantizarle el aplauso que merece. Por eso Menotti hace hincapié en la importancia que tiene su presencia en el plantel y el equipo: “Messi le resuelve un montón de problemas a la selección. Pero necesita la ayuda de sus compañeros, encontrarle los mejores intérpretes para que él pueda tener líneas de pase”.

Alrededor de Leo

La inserción del capitán en un grupo que se armó sin él es el gran desafío que afronta Lionel Scaloni. El inexperto entrenador albiceleste fue armando una base de futbolistas y de juego en ausencia del 10, que primero se tomó unos meses de descanso luego del Mundial de Rusia y luego recibió la citada sanción disciplinaria. Ahora, con las eliminatorias para Qatar 2022 a la vista -en Sudamérica comienzan en marzo-el tema vuelve a estar sobre la mesa.

Desde 2006 a la fecha, todos los técnicos que han pasado por el banquillo argentino han buscado -por ahora, con un resultado relativo- la manera de que el Messi vestido de celeste y blanco rinda igual que aquel que se pone cada semana la casaca blaugrana. Delantero por el centro, extremo por derecha, volante libre en un 4-3-3, con más o menos compañía, nunca hubo un método que lograra prolongar en el tiempo un rendimiento semejante, más allá de algunos partidos sueltos. Y aun así, el 10 consiguió convertirse en el máximo goleador de la historia de la selección.

Scaloni parece apostar por la fórmula más parecida a la que actualmente puede verse en el Barça, es decir, unos metros por detrás de dos delanteros: Suárez Griezmann en un caso; Agüero Lautaro Martínez, en el otro. La dinámica de Rodrigo De Paul y Marcos Acuña o Giovanni Lo Celso como volantes internos y la decidida apuesta por un mediocentro con más juego que capacidad de contención como Paredes, le han dado a la “nueva” Argentina intensidad en el ida y vuelta y profundidad de pase entre las diferentes líneas.

Es en ese circuito que el Messi versión 2019 parece encajar como constructor en ataque, el hombre indicado para conectar con los de arriba, con los laterales que escalan por las bandas o los propios mediocampistas que aparezcan por sorpresa. Sin descartar, por supuesto, su propia llegada al área para definir.

Un Messi más maduro, conceptual, más rabio para guiar a los jóvenes en King Saud Stadium.