FC BARCELONA

Leo Messi o Vermaelen, la duda de Luis Enrique

La intención del técnico es jugar con el mismo once de Berlín, con el relevo de Bravo por Ter Stegen, si bien también tiene en la cabeza un cambio de planteamiento y reforzar el centro del campo en caso de que Leo se resintiera de la rodilla

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lucho-campet / sport

Jordi Gil

El clásico ya está a la vuela de esquina y Luis Enrique tiene meditadas las opciones que puede plantear en el Bernabéu. La decisión final no la podrá tomar hasta el viernes o el mismo sábado, horas antes del inicio del encuentro, cuando compruebe el estado físico de todos los internacionales, pero las distintas alternativas están definidas. 

Principalmente, el asturiano cuenta con dos vías de actuación. Si está Messi, Lucho optaría probablemente por el mismo once que disputó la final de Berlín, con el único cambio de Bravo por Ter Stegen. La otra opción, más revolucionaría, llegaría si Leo al final no puede saltar en el once titular. El asturiano se plantea en este supuesto alterar su dibujo y jugar con un 4-4-2 en el que incluso Vermaelen podría tener su sitio.

El técnico barcelonista condicionará cualquier decisión a las sensaciones de Messi. El crack es quien tendrá la última palabra sobre su presencia en el once. La recuperación va por el buen camino. Las sesiones con el Barça B son positivas y en su incorporación con el grupo también mostró que la rodilla está superando las diferentes pruebas. De  todos modos, Leo solo ha practicado hasta la fecha entrenamientos poco exigentes y será a finales de semana cuando se tome una decisión definitiva.

Messi está poniendo máximo interés para llegar al clásico y será difícil frenarle o pedirle que se quede de entrada en el banquillo en el Bernabéu. De recibir el alta y entrenarse a tope en las dos últimas sesiones, el jugador querrá estar sobre el campo ayudando a sus compañeros en un encuentro crucial. Para Luis Enrique sería un alivio y una alegría. Ya no tendría que romperse la cabeza con otro plan, que siempre sería una incógnita.

cambio de dibujo El míster aún tiene en mente un 4-4-2, pero con el handicap de haberlo probado solo en el arranque del encuentro ante el BATE Borisov. La lesión de Rakitic no le permitió dar continuidad a un centro del campo formado por Busquets, Sergi Roberto, Iniesta, el croata y los dos puntas, Luis Suárez y Neymar.

En esta ocasión, Luis Enrique podría buscar más músculo que en el partido ante el BATE con la inclusión de Thomas Vermaelen en defensa, acompañando a Gerard Piqué. El belga asegura mayor contundencia defensiva y control en el balón parado. El Barça, por el contrario, perdería la velocidad de Javier Mascherano para recular y rectificar cuando el Madrid gane la espalda ya sea de Piqué o de alguno de los laterales. El ‘Jefecito’ pasaría al centro del campo para acompañar a Busquets, con Rakitic como tercer medio y Andrés Iniesta de media punta. El ataque sería para la dupla Suárez-Neymar.

El 4-4-2 también deja abierta la puerta a Sergi Roberto. Luis Enrique dijo que quiere aprovechar el momento dulce del reusense y estirarlo al máximo. La vuelta de Rakitic crea un dilema ya que al técnico le gusta la fuerza que aporta el croata, pero con Sergi Roberto  gana en mucha más calidad en el pase y en su facilidad para romper líneas con el balón controlado. Rakitic tiene más oficio y Sergi es un futbolista con un ADN Barça mucho más pronunciado. 

los jóvenes, a la espera De todas las posibilidades, la que tiene menos números de fructificar a día de hoy es la de mantener sin Messi el 4-3-3 habitual. Para jugar con tres delanteros natos con la ausencia de Leo, solo puede entrar en juego uno de los jóvenes que han ascendido esta temporada del filial. Luis Enrique ha alternado a Munir y Sandro, si bien el hispano-marroquí ha ofrecido un mejor nivel en los últimos partidos y parece tener la delantera en esta posición. 

Munir sigue sin marcar, pero tanto antel BATE como frente al Villarreal tuvo la habilidad de forzar dos penalties que significaron dos tantos muy valiosos. Sandro tampoco está acertado de cara a puerta, pero a su favor está la mayor capacidad de lucha, sobre todo si Marcelo se recupera y es necesario cubrir la banda izquierda madridista.

Precisamente, la entrada en liza del brasileño es uno de los puntos que Luis Enrique tendrá muy en cuenta. Marcelo da otro aire al Real Madrid y su proyección ofensiva ofrece muchas alternativas al cuadro blanco. Es muy necesario cubrirle y, en este sentido, incorporar a un cuatro centrocampista, ya sea Rakitic o Sergi Roberto también ayudaría.

Luis Enrique decidirá en los próximos días, aunque cada vez observa con mayor tranquilidad que Leo Messi, el mejor futbolista del planeta, probablemente estará a disposición de saltar incluso en el once titular.