Máxima tensión entre Mendes y Ansu Fati

El agente aprieta para que salga del Barça, pero el jugador no quiere irse

La propuesta del Wolverhampton interesa al club blaugrana, pero se va a caer

Celta - FC Barcelona | El gol de Ansu Fati

Celta - FC Barcelona | El gol de Ansu Fati / LaLiga

L. Miguelsanz

L. Miguelsanz

La relación agente-jugador siempre es especial y pasa por todo tipo de momentos. Los dos se necesitan para beneficiarse mútumuamente y, cuando las cosas funcionan, los tándems siempre salen ganando y las complicidades crecen. Pero cuando algo se tuerce suelen surgir las tensiones. Y todo suele suceder cuando los futbolistas pierden el aura de titulares y, o bien deben salir de los equipos, o apretan a sus representantes para que se les busque nuevo destino.

Y muchas veces no es fácil. Entre Ansu Fati y su agente, Jorge Mendes, ahora hay máxima tensión. El todopoderoso representante portugués se comprometió con el Barça a hacer todo lo posible para dar salida al futbolista y Ansu se ha plantado y no se quiere ir. 

En una situación así puede pasar de todo, hasta la ruptura entre ellos, aunque Mendes invirtió mucho tiempo y recursos en conseguir la representación de Ansu justo cuando iba a dar el salto al primer equipo. El agente, tal vez el más avispado y profesional de todo el mercado, tiene muy claro que el futbolista aquí no tiene ni presente ni futuro y como gestor de su carrera está obligado a hacerle entrar en razón. Y no por hacerle un favor al Barça sino para hacérselo al chico. Porque otra temporada en blanco para Ansu podría ser un golpe determinante para su futuro deportivo.

Mendes aún se ve capaz de convencer al jugador y a su entorno familiar de que lo mejor es emigrar a tiempo. Ha intentado colocarle en los mejores equipos de la Premier League, pero hay dudas y no ha conseguido la ansiada oferta millonaria que espera el Barça. Es por ello que propuso que fuera al Wolrhampton en un trueque con Rúben Neves más 30 millones de euros para el club blaugrana. Vaya, una operación que hubiese reportado un beneficio económico de unos 60 kilos para el club. Y la solución clara para inscribir futbolistas.

El Barça daría la OK a esta opción, pero Ansu se ha enrocado porque quiere seguir aquí y porque no quiere jugar en el Wolverhampton por mucho que Mendes le haya prometido que será un impasse en su carrera. Esta vía parece totalmente muerta en estos momentos y difícil de resucitar y ahora lo que habrá que ver es si surge otra propuesta, aunque sea menor, y que sea del gusto de todas las partes. Díficil, pero para Mendes no hay nada imposible.

El tiempo apremia y el Barça necesita soluciones. Pero Mendes sabe que si tensa mucho la cuerda, la relación entre él y el jugador puede acabar por romperse para siempre. El club blaugrana se ha comprometido a poner de su parte porque necesita salidas y también apretará a Ansu, pero él tiene la sartén por el mango.