¿Por qué Marc Bernal estará un año de baja?

El 28 de abril de 2006, Xavi volvió a una lista de convocados casi cinco meses después de haber sufrido la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha durante un entrenamiento. El entonces futbolista blaugrana tenía 26 años y, aunque el periodo previsto para su regreso a los terrenos de juego fue inicialmente de seis meses, plazo habitual entonces en este tipo de lesiones, el centrocampista recortó un mes su recuperación.

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Hace años la consigna que imperaba entre los profesionales que formaban parte de una plantilla, futbolistas, técnicos, recuperadores y médicos, era buscar la manera de regresar lo antes posible. Bojan Krkic, que también sufrió esta lesión como jugador del Stoke City, entró en el túnel a finales del mes de enero de 2015 y volvió a jugar seis meses después, a finales del mes de julio. Todo eso ha pasado a la historia. Lo demuestran los casos recientes de Gavi, que en octubre hará un año que se lesionó con la selección española, o el de Marc Bernal, a quien no se le espera hasta de aquí a doce meses.

El traumatólogo Jordi Ardèvol, que estuvo dieciséis años al servicio del Barça, decía en una entrevista de 2006 para SPORT lo siguiente: "Los jugadores, los deportistas, tanto de élite como de formación, son patrimonio del club. La presión consiste en acortar tiempos, minimizar secuelas...". Ese tipo de presión ya pasó a la historia. Dieciocho años más tarde, el propio doctor Ardèvol asegura a este mismo diario que "hace ya unos cuantos años, unos ocho, que cada vez tenemos más claro que al querer recortar los tiempos el índice de rerruptura era relativamente alto".

Consenso mundial

Este prestigioso traumatólogo explica que "todas las sociedades internacionales de traumatología han hecho grupos de estudio, valorado todo lo publicado y se ha podido comprobar que existían menos problemas si se alargaba el tiempo de retorno, existe ese consenso ahora". Ahí están los casos recientes del propio Gavi, pero también de Alexia Putellas o Carolina Marín, "que ya verás lo que tardará", augura Ardèvol, que explica también que "si superas los ocho o diez meses, el riesgo de rerruptura disminuye".

En ese sentido, el fútbol, que es un deporte de pivotación, la edad y el seño también pueden ser factores determinantes a la hora de prescribir un determinado tiempo de recuperación antes de volver a competir: "El tiempo de curación biológica es el mismo, pero hay mucho más riesgo en deportes de pivotación. En el ciclismo, por ejemplo, no hay tanto, pero el fútbol, el rugbi... También hay una cierta idea, pero hay que acabar de afinarla, que asegura que en los jóvenes y las mujeres hay que ser aún más prudentes".