Lamine Yamal y Nico Williams: el regreso a los orígenes

En el marco de la renovación de plantilla del FC Barcelona de cara a la próxima temporada, el fichaje de Nico Williams es prioritario en clave presente y futuro. El delantero del Athletic Club está comprometido a firmar como blaugrana y la dirección deportiva trabaja para poder cerrar la operación. De esta manera, Xavi Hernández podrá contar con dos extremos puros a pierna cambiada en su equipo: Lamine Yamal por la derecha y Nico Williams por la izquierda.

El plan del PSG que aleja a Xavi Simons del Barça

La irrupción de Lamine Yamal ha supuesto un terremoto en el ataque blaugrana. A sus 17 años se ha erigido como el único extremo 'titular' del Barça de Xavi. El técnico egarense empezó con pies de plomo con el canterano, pero lo mejor para su progresión ha sido no cortarle las alas ni ponerle un techo. El '27' culé disfruta jugando sin presión y se ha adueñado de la banda derecha. Un carril en el que, públicamente, Ferran Torres y Raphinha han argumentado que prefieren jugar por ese lado.

El de Rocafonda es el segundo jugador de la plantilla que ha participado en más encuentros a lo largo de esta temporada (46), tan solo superado por Gündogan (48). El Barça del presente y del futuro pasa, sin ninguna duda, por las botas de Lamine. Este curso, en su primer año en la élite futbolística, ha anotado seis goles y ha repartido nueve asistencias vistiendo la zamarra azulgrana.

Así pues, la hipotética llegada de Nico Williams a la capital catalana seguiría marcando una línea estratégica en la planificación deportiva: apostar por talento emergente de presente y futuro. Buscar en La Masia, pero no desaprovechar ocasiones que el mercado de fichajes ofrezca, como la incorporación del futbolista del Athletic, a quien se le considera prioritario.

Su llegada tendría un coste de 50 millones de euros y la poco probable clasificación de los 'leones' a la Champions League ayuda al joven futbolista a tomar una de las decisiones más importantes de su carrera. Todo ello, después de ganar la tan ansiada Copa: un título que no se colocaba en las vitrinas de San Mamés desde hacía 40 años.

Dos extremos puros

Una de las máximas del estilo Barça que quiere seguir implantando Xavi Hernández es la de jugar con dos extremos puros, bien abiertos. Con velocidad, regate e instinto goleador. Que sean decisivos, pero que también sean pacientes por si el balón no les llega constantemente. El objetivo no es otro que el de ampliar el terreno de juego lo máximo posible. Lamine y Nico cuadran a la perfección en estos estándares.

De esta manera, el Barça volvería a estar comandado por dos extremos que jugarían a pierna cambiada. Recordando tiempos pasados con Leo Messi por la banda derecha y Ronaldinho o Thierry Henry por el costado izquierdo del ataque. El desborde por bandera, pero también la capacidad de jugar con su pierna buena por dentro, buscando diagonales y la combinación del esférico con el resto de compañeros.

Más allá de lo deportivo

El vínculo que une a Lamine Yamal y Nico Williams va mucho más allá de los terrenos de juego. Su relación es muy estrecha y siempre se les ha visto muy unidos en las concentraciones de la selección española y también en los partidos de clubes en los que se han visto las caras. No solo a ellos dos. El futbolista del Athletic mantiene un vínculo muy cercano con otros varios jugadores del Barça: Pedri, Gavi, Balde o Ferran Torres. También con Cubarsí, el último en unirse a la llamada de la 'Roja'.

El pequeño de los Williams, que el 12 de julio cumplirá 22 años, nació en el 2022, igual que Pedri. Tiene dos años menos que Ferran, pero uno más que Fermín y Balde, dos más que Gavi o cinco más que Lamine y Cubarsí.

Todos ellos tienen muchos números de recibir la llamada de Luis de la Fuente para la Eurocopa 2024 de este verano. El buen ambiente generado entre ellos fuera de los vestuarios, ya se ha visto trasladado sobre el césped con la selección. Ahora, es turno de mantenerlo e incrementarlo con el Barça y, en esta ecuación, la llegada de Nico sería un ingrediente más que interesante.