Kubala le hizo un 7 al Sporting

El pasado jueves se cumplieron 70 años de una hazaña hasta ahora nunca repetida por jugadores del FC Barcelona: convertir siete goles en un partido de Liga. Ladislao Kubala lo consiguió en un duelo contra el Sporting de Gijón (9-0) celebrado el 10 de febrero de 1952 en el campo de Les Corts. Una gran exhibición, en esta ocasión superlativa, que le sirvió al delantero para ir forjando la leyenda en la que se convertiría.

El Barça afrontó el encuentro después de concentrarse en Caldes de Montbui y no en Vallvidrera como acostumbraba. No pudo contar con el ariete Jordi Vila, lesionado en el último partido contra la Real Sociedad y durante la semana se especuló con el regreso de Kubala, que no jugaba desde el 2 de diciembre de 1951, contra el Espanyol, por una lesión en el pie y sumaba ocho partidos en el dique seco.

El interés, obviamente, se centró en el regreso de Kubala, que se confirmó. El húngaro afrontaba su segunda temporada en el Barça y deslumbró con luz propia liderando al equipo hacia todos los títulos, de ahí que ese conjunto azulgrana entrara en la historia como el Barça de las ‘Cinc Copes’.

La goleada, según la prensa de la época, tuvo varias explicaciones: el extenso parte de bajas con el que llegó el equipo asturiano a Barcelona y el soberbio juego desplegado por los jugadores de Ferdinand Daucik, que dieron un recital de fútbol y efectividad.

El Sporting viajó no pudo contar con los lesionados Cástulo, Molinucu, Cholo Dindurra, Ortiz y Campos y, sobre el césped de Les Corts, mostró muy “poca codicia”. El equipo de Amadeo Sánchez, más interesado en no sumar más inquilinos a la enfermería que otra cosa, fue barrido por un Barça tan arrollador como inspirado.

Lluvia de Goles

Kubala abrió el marcador en el minuto 11 al transformar una falta, elevando el balón por encima de la barrera. Era una de sus especialidades, que ejecutaba con rosca y efecto, algo nunca visto entonces. Poco después, en el minuto 15, Manchón aprovechó un error de la zaga visitante para firmar el 2-0. El tercero llegó en el minuto 27 y fue el segundo de Kubala, que anotó desde cerca tras recoger un rebote dentro del área. Aloy, en el 36, cerró la cuenta del primer tiempo tras una asistencia de Basora.

En la segunda mitad el Barça empezó relajado, pero cuando pisó el acelerador, nada lo detuvo. Logró el quinto tanto en el minuto 70. Kubala llegó al hat-trick al transformar un penalti por manos de Medina dentro del área. Tres minutos después llegó el 6-0, cuarto del as húngaro, que entró con el balón dentro del marco del Sporting. En el minuto 75, el 7-0 y quinto de Kubala, también de penalti por manos de Iruretagoyena dentro del área.

En el minuto 83 el Barça hizo subir el 8-0, también de Kubala, tras un disparo por alto. ‘Marca’ aseguró que el disparo del rubio jugador dejó al meta Sión “viendo visiones”. Y en el último minuto de partido, la guinda, el 9-0 y séptimo gol de Kubala, de otro disparo fuerte y raso. Los últimos cinco goles los marcó en 20 minutos, a una media de uno cada cuatro minutos.

Críticas por su juego

El Sporting admitió la superioridad azulgrana en palabras de su delegado –“sería estúpido buscar disculpas”, reconoció– aunque se quejó de que Kubala había utilizado “procedimientos antirreglamentarios”, refiriéndose a que “trabaja con los codos y protege el balón dando la espalda al adversario de manera incorrecta”.

El equipo de Daucik, después de esta demostración de fuerza, puso la directa hacia el liderato y, cuando lo alcanzó, en la jornada 23, no lo soltó hasta cantar el alirón. Su equipo anotó 92 goles en 30 partidos, obteniendo el que hasta entonces era el mejor promedio de su historia en la Liga: 3,02 goles por partido. El equipo que firmó la goleada ante el Sporting lo integraron Ramallets; Martín, Biosca, Seguer; Bosch, Segarra; Basora, César, Aloy, Kubala y Manchón. En la plantilla también estaban Gonzalvo III, Aldecoa, Velasco, Vila, Calvet, Moreno, Torra, Tejedor, Brugué, Ferrer, Curta, Escudero, Nicolau…

Curiosamente, ese mismo día, pero por la mañana en el campo de Hostafrancs, La España Industrial, filial azulgrana, también había ganado por 9-0 (al Mahón) en partido de Tercera División (grupo III). Y se había llegado 4-0 al descanso. Eso sí, nadie había convertido siete goles, pero Salas firmó cuatro y Gracia tres, completando la goleada Peiró y Mas.

Hasta la fecha, solo Bata, del Athletic, había sido capaz de anotar siete dianas en un mismo partido. Y, curiosamente, se los había convertido al FC Barcelona (12-1) en San Mamés en febrero 1931. Desde que lo hiciera Kubala, nadie lo ha podido repetir en Liga, ni Messi, aunque sí lo logró el paraguayo Eulogio Martínez en un partido de Copa contra el Atlético, también en Les Corts (8-1), en mayo de 1957.