Griezmann sigue desaparecido
El francés regresó a la titularidad tres partidos después; aportó trabajo al colectivo como siempre, pero no marcó diferencias
No hizo méritos para arrebatarle el puesto a Dembélé en la 'final' de París si Koeman mantiene el 3-5-2
Ronald Koeman volvió a escribir en la pizarra de los once titulares el nombre de Antoine Griezmann. El francés había sido suplente en los tres últimos partidos, apenas 17 minutos ante el Elche, se quedó sin jugar en el Sánchez Pizjuán y en la remontada copera entró en el minuto 63. El sistema 3-5-2 quita una pieza arriba y para el ‘Principito’ era una prueba de fuego para arrebatarle la titularidad a Dembélé, sobre todo de cara al partido del miércoles en París. No la superó.
Más de lo mismo
Apenas dos remates con la cabeza fue la aportación ofensiva de Antoine, al que nada se le puede reprochar en el sentido colectivo y de trabajo, pero son ya siete los partidos sin gol y hay que pedirle mucho más a un futbolista que debe marcar las diferencias. Dembélé, sin hacer un gran partido y con menos minutos, dio más sensación de peligro que su compatriota y, a menos que el técnico cambie el sistema, Griezmann apunta de nuevo al banquillo.
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