Fermín López, el ejemplo del proceder distinto del Barça

El mediapunta andaluz rompe con todas las ideas preconcebidas de los ñiños prodigio de La Masia que queman etapas a una velocidad vertiginosa

Fermín López: "Mi sueño es estar muchos años en el Barça"

Fermín Lóptez atendió a SPORT y habló sobre su futuro en el Barça... y como goleador del nuevo Camp Nou / JOAN REPRESA

Jaume Marcet

Jaume Marcet

Fermín López se ha consolidado en la plantilla del primer equipo del Barça después de una trayectoria en la cantera blaugrana que descifra algunas de las claves del éxito de la fórmula de La Masia.

Cuando el Barça se decide a fichar a Fermín, el onubense jugaba en el Infantil B del Betis. Era un jugador muy habilidoso del que ya se tenían informes positivos desde tres años antes, pero no se decidió su incorporación hasta el verano del 2016. El entonces director del fútbol base Jordi Roura se convenció de que había que ficharlo en un torneo de infantiles en Tarragona. Su handicap era el físico pero el talento era indudable. 'Fer' se trasladó a La Masia y allí empezó un camino más complicado de lo esperado.

De más a menos

Su entrenador en el Infantil A fue Carles Martínez , actual técnico del Toulouse, que ya reparó en su enorme talento y su escaso físico: “ya cuando lo vi en el Betis les dije a los responsables que por su físico sufriría en los primeros años, pero que si no apostábamos por él nos arrepentiríamos”.

Fermín López, con la camiseta azulgrana

Fermín López, con la camiseta azulgrana / Ignasi Paredes

Con el Infantil A marcó 12 goles y en su salto al Cadete B culminó una notable temporada con 13 tantos.

El físico, un obstáculo complicado

Pese a ello, Fermín no era un titular fijo a causa de un físico muy precario. El entonces director del fútbol base Jordi Roura aconsejaba a los entrenadores alinearlo aunque su limitada estatura y escasa fuerza era un handicap importante para competir. Su último año de cadete y el primer año de juvenil fueron para Fermín una prueba de paciencia enorme. No es casualidad que entre las dos temporadas no pasase de los cinco goles. Su crecimiento tardío le impedía poder ganar duelos, los minutos escaseaban y parecía que su corta estatura iba a ser un freno total para explotar su talento.

Fermín jugó dos años seguidos con el Juvenil B y en su último año en el fútbol base con el Juvenil A empezó a rendir tal y como se esperaba cuando se lo fichó. En cualquier otro club, Fermín no se habría mantenido tantos años siendo habitualmente suplente. No habría habido paciencia y se le hubiera buscado una salida.

Paciencia y cesión

La paciencia del jugador, pero sobre todo la apuesta determinada de los responsables del club, dio sus frutos. El Barça era consciente que la apuesta por Fermín era una inversión a largo plazo con un camino lleno de espinas. Las condiciones atléticas iban a minar el camino pero, al final, tal y como explica su entrenador en el Juvenil A Óscar López estas dificultades "le hicieron progresar y desarrollar otras habilidades clave".

Fermín López: Trayectoria envidiable en el Barça

Fermín López: Trayectoria envidiable en el Barça / Cedidas

Después de un final de curso positivo con el Juvenil A, Fermín asumió con positividad la decisión del Barça de cederlo al Linares. Muchos otros se hubieran desanimado y perdido el tren del Barça pero Fermín lo vio como una oportunidad. Con el Linares se salió y convenció a Xavi en la pretemporada.

Una actitud ejemplar

Fermín es un ejemplo para el resto de canteranos, el camino es, a veces, sinuoso y la clave es afrontarlo con una mentalidad competitiva desbordante que te permita seguir evolucionado. El Barça apostó por el talento puro a largo plazo sin dejarse engañar por su físico y, con el tiempo, estas dificultades han catapultado al futbolista andaluz a la élite. Un buen ejemplo para el resto de aspirantes a cracks.