Duras críticas al Espai Barça: "Es un pastiche"

El arquitecto Òscar Tusquets y el empresario y antiguo directivo del club Gabriel Masfurroll, entre otros, han valorado la marcha del Espai Barça en el marco del foro 'DIÀLEGS CONSTRUCTIUS', ESPAI BARÇA', organizado por 'Arquitectes per l'Arquitectura'

Diez años del referéndum del Espai Barça

El Barça presenta las novedades del nuevo Espai Barça

El Barça presenta las novedades del nuevo Espai Barça / FCB

Sergi Capdevila

Sergi Capdevila

Interesante coloquio el que se mantuvo en el precioso enclave del Recinto Modernista de Sant Pau en Barcelona acerca del proyecto del Espai Barça, que, si nada su tuerce, verá la luz a finales de este año.

Organizado por la asociación 'Arquitectes per l'Arquitectura', el debate 'DIÀLEGS CONSTRUCTIUS', ESPAI BARÇA contó con la presencia de personalidades como el arquitecto Òscar Tusquets, el empresario y antiguo directivo del club azulgrana Gabriel Masfurroll, el regidor de arquitectura de Barcelona Daniel Mòdol, la vicepresidenta del FC Barcelona Elena Fort o Lluís Moya, arquitecto y director de la Oficina Técnica del Barça.

DUDAS

Las dos primeras intervenciones sobre el proyecto fueron muy duras. En la primera, Òscar Tusquets fue contundente: : “Soy pesimista. Soy culé desde hace muchos años, tengo um escudo de Núñez por mis 25 años de antigüedad de hace no sé cuanto, pero estoy pesimista con el futuro deportivo. Me consuela pensar que por mal que vaya la obra del nuevo estadio, nunca será tan feo como el Bernabéu, eso sí...".

Imagen del debate mantenido en el Recinte Modernista de Sant Pau

Imagen del debate mantenido en el Recinte Modernista de Sant Pau / AxA

"El concepto ganador de Foster ya no me enloquecía, había esa banalidad de hacer una piel con leds…qué lugar común. Luego se hizo otro concurso y el proyecto que ganó me gustaba, me gustaba cómo solucionaba la fachada. Acabó de estar en Munich, el estadio está en medio de la nada y puede tener la piel que quiera. Pero el Bernabéu y el Camp Nou están en zona urbana. Que los arquitectos que proyectaron eso no tengan ahora tanto poder, me preocupa. Una obra que no diriges no es tuya creo. No sé hasta qué punto se está respetando lo que más me gustaba de esa obra. A la que no hay un responsable, sino una ingeniería por medio, con unos turcos de una empresa…mi experiencia con estas cosas es que es muy difícil que termine bien", añadía Tusquets.

“Cuando veo que el planteamiento es: "No se lo daremos a ninguna empresa española, se lo daremos a una turca, que no ha hecho nunca ningún estadio y es la que lo hará más rápido y más barato". Yo, como arquitecto, tiemblo. Preveo lo peor. Que los proyectistas no dirijan la obra me parece de una gravedad irrecuperable”, insistía Tusquets.

MASFURROLL, CONTUNDENTE

Por su lado, Masfurroll fue más allá en la crítica: "Este Espai Barça es un pastiche. Cuando se decidió que había ganado Foster lo único que había hecho era poner la piel. El proyecto lo ganaron Carlos Ferrater y Lluís Vives. Pusieron a Foster porque lucía más. Soy pesimista con el Barça, con la institución. Creo que se está descapitalizando".

Más de Masfurroll: "El Barça está en un lío importante y el Espai Barça es un ejemplo más. Creo que no hay nada que hacer, estamos entrando en un pozo del que tardaremos muchos años en salir. Vivimos épocas de desierto en las que no ganábamos nada. Pero éramos más que un club; ahora ni eso, somos un club más".

LOS ARGUMENTOS DE FORT Y LLUÍS MOYA

Empezaba su intervención Elena Fort sorprendida: “He venido a un coloquio sobre el Espai Barça. No soy arquitecta. No sabía que veníamos a hacer un debate electoral del Barça. Tranquilos, no sufran. Tendrían que haber sufrido más en el año 2021. Esta junta ha salvado y está en proceso de salvar el club. Habrá noticias pronto...".

“Mantener el coste y los plazos en las obras es muy complejo y estamos sobre las previsiones que debíamos tener. Estamos siguiendo un modelo que responde a las expectativas del proyecto y hasta que no se demuestre lo contrario seguiré pensando que es la mejor actuación posible", defendió Lluís Moya.