Las dos caras de Dembélé en Riazor

Asistencia a Coutinho en el 0-1 y participación destacada en el 0-2. Ousmané Dembélé deja Riazor con la sensación de que aún tiene mucho camino por recorrer para alcanzar el rendimiento que se espera del joven futbolista francés pero, al mismo tiempo, dejando detalles (aunque sea a cuenta gotas) que puede ser un delantero importante para potenciar, aún más, la pegada del Barça en el futuro.

Dembélé ha sido la gran novedad en la alineación inicial que Ernesto Valverde ha presentado en el partido que ha cerrado definitivamente la insultante superioridad de los azulgrana en el campeonato de liga. El delantero galo, con Semedo por detrás, ha jugado en la banda derecha, pero penetrando mucho por el centro.

Protagonista en dos jugadas

Desconectado, especialmente en la primera parte ya que al inicio de la segunda mitad entró un poco más en juego, Dembéle se mostró en líneas generales impreciso en el pase, fallón y demasiado ausente del ritmo de juego que imponen sus compañeros. Hubo momentos en que, sinceramente, parecía que no estaba sobre el terreno de juego. Pero, curiosamente, fue protagonista destacado al participar en las dos jugadas que acabaron con los goles de Coutinho y Messi.

Sus galopadas, con el balón controlado, fue lo más destacado del joven francés, pero le ha faltado más acierto en el pase final para hacer buena sus acciones. Esa inseguridad a la hora de pasar el balón está influenciada, sin duda, por la preciptación y las ganas de gustar que arrastra el delantero. La mochila de su traspaso está siendo muy pesada.

Y pese al mal partido de Dembéle, el galo fue protagonista en dos de los cuatro goles que el Barcelona ha conseguido en Riazor. De las botas de Ousmané salió, curiosamente, la asistencia a Coutinho que el brasileño, de una forma magistral, ha completado con el 0-1.

También ha participado en el segundo tanto del Barcelona. Dembélé ha realizado una impresionante galopada, desde su campo, que ha completado cediendo el esférico a Luis Suárez; el uruguayo ha centrado a Messi para lograr el 0-2.

Dembélé deja Riazor mostrando sus dos caras. Su participación en dos goles es la faceta más positiva del futbolista; su desconexión es un factor que Ernesto Valverde tendrá que trabajar para que el francés tenga, en un futuro no muy lejano, el protagonismo esperado cuando se le fichó.