Busquets, el jugador perfecto

El centrocampista de Badía es una pieza imprescindible en los esquemas de Luis Enrique y Vicente del Bosque, que no conciben sus equipos sin su concurso, equilibrando y dirigiendo las operaciones desde su posición de mediocentro.

Mucho se habla y se escribe sobre el tridente que conforman Neymar, Luis Suárez y Leo Messi, pero cuando se analiza la incidencia de los futbolistas en el juego, Busquets vuelve a estar en lo más alto. El canterano lidera la clasificación de minutos disputados en lo que llevamos de campeonato. ‘Busi’ ha sido utilizado en 20 de los 22 partidos oficiales y ha jugado 1.626 de los 2.010 minutos posibles. Además, ha sido elegido siempre en el once titular, tanto en el Barça como en la selección española. Solo Ivan Rakitic le supera en una estadística, la de partidos disputados. El croata ha sido alineado en 21 partidos, aunque no siempre saliendo desde el inicio.

CLAVE EN ESPAÑA... 

Si nos limitáramos a los números acumulados por el Barça en lo que llevamos de campaña, Busquets estaría por detrás de Luis Suárez. El charrúa, sin embargo, no ha participado aún con su selección este ejercicio. El de Badía, en cambio, ha sido vital para que España sellara la clasificación y lo hiciera como primera de grupo, desbancando a Eslovaquia. Busquets ha sido alineado por Del Bosque como titular en los cuatro últimos partidos de la fase de clasificación y no se ha perdido ni un minuto, a pesar de que el último encuentro, contra Macedonia, ya era intrascendente. Un cúmulo de minutos sobre sus piernas que no ha impedido la progresión del centrocampista.

... Y EN EL BARÇA

Busquets empezó, como cada año, un poco falto de ritmo, pero con el paso de las jornadas ha ido adquiriendo ese tono físico que hace funcionar al Barça en su mejor versión. La falta de una pretemporada convencional le pasó factura, pero coincidiendo con la lesión de Leo Messi, el de Badía ha dado un paso adelante. En ausencia del astro argentino, los altavoces blaugrana han reclamado un plus a Neymar y Luis Suárez. Los dos han cumplido con creces acaparando el capítulo goleador del equipo. Pero la gran diferencia ha estado en el crecimiento de Busquets.

'Busi' ha ido creciendo hasta alcanzar su mejor versión y eso lo ha agradecido el Barça en un momento difíci. La prolongada ausencia de Messi dejaba en el aire la incógnita de si el Barça iba a seguir siendo un equipo competitivo al más alto nivel. La derrota en el Sánchez Pizjuán, frente al Sevilla, no hizo más que alimentar los temores, pero desde entonces, el conjunto blaugrana se ha mostrado intratable tanto en la Liga como en la Champions League, torneo en el que ha dejado prácticamente encarrilado el pase a falta de dos jornadas.

La ostensible mejora del equipo ha sido proporcional a la mejora de Busquets. El de Badía ha completado auténticas exhibiciones tanto en la recuperación del balón como en la creación del juego. Solo hay que hacer un repaso a los últimos partidos del Barça para comprobar que el conjunto de Luis Enrique ha vuelto a recuperar esa estabilidad que se echó de menos en el inicio de campaña. El equipo blaugrana ha encadenado por fin tres partidos sin encajar ni un solo gol y ha sacado adelante los partidos con solvencia, recuperando esa presión que identifica al equipo.

Busquets es la pieza clave que permite al Barça explotar las líneas maestras de su excelencia. El conjunto blaugrana vuelve a dominar a sus rivales, a recuperar el balón con celeridad y a atacar con esa endiablada velocidad que solo sus interiores y sus delanteros saben imprimir al juego. El canterano lleva recuperados 96 balones –69 en la Liga y 27 en la Champions League– en los 16 partidos que lleva disputados con el Barça, lo que supone una media de seis por partido. Un dato clave en esos elevados porcentajes de posesión que acostumbran a tener los blaugrana.

PROTEGERLO

La importancia de Busquets en el engranaje blaugrana hace que Luis Enrique se exprima el cerebro para poderle dar minutos de descanso pensando en los partidos importantes. El carrusel de lesiones que han asolado especialmente la medular lo ha impedido hasta la fecha. Del Bosque y el calendario tampoco han ayudado y ahora toca rezar de cara al Santiago Bernabéu.