El Bayern medirá el nivel actual del Barça

Obligados a competir

Aunque todavía es muy pronto, y presumiblemente Xavi Hernández mejorará el bloque a medida que las nuevas incorporaciones se vayan adaptando al nuevo modelo de juego, el encuentro ante el Bayern debe servir de referencia para ver cuál es el verdadero potencial de este nuevo e ilusionante Barça. 

Las últimas humillaciones sufridas por el Barça ante el club bávaro hicieron muchísimo daño, y con revancha o sin ella, es el momento de competir de tú a tú y demostrar un nivel similar o superior al conjunto alemán. Será sin duda un partido muy especial para el nuevo ídolo azulgrana, Lewandowski, tras su larga y exitosa trayectoria, vuelve y emotivamente será un partido muy complicado de jugar. 

Por otro lado, Xavi insiste en cada rueda de prensa tras partido, en que el equipo debe controlar más el juego y el partido, para que no sucedan caos tácticos como los 20 minutos iniciales del Sánchez Pizjuán, pues éste es el día donde más debe controlarse el ritmo del partido, por la peligrosidad de los alemanes.

Los peligros del Bayern

En general, el equipo de Julian Nagelsmann domina diferentes registros del juego, desde el ataque posicional, a las transiciones rápidas o contraataques, pasando por el juego directo y vertical con pases largos a las espaldas de las defensas rivales. No es fácil afrontar un partido ante ellos, pero tal vez los tres últimos empates hayan mermado un poco su hasta ahora sólida confianza. 

Entre las claves del partido, sin duda está anular o minimizar la participación de Kimmich. Es el jugador que inicia la mayoría de las acciones de ataque. Veo en Gavi al jugador ideal para hacerle sombra e impedir que sea protagonista, por su energía, tesón, ímpetu y agresividad. 

La salida de balón la hace como si fueran tres centrales, ya que Pavard se queda como central derecho, y el Barça podría presionar en 4-4-2, con Gavi junto a Lewandowski, y los dos extremos como centrocampistas de banda, con Busquest y Pedri por el centro. Obligar a que sean los centrales o Sabitzer los encargados de subir el balón, y tras robo o recuperación, intentar transiciones rápidas o contraataques con la velocidad de Dembélé y Raphinha, que pueden dañar a su defensa. 

Las bandas son otro punto fuerte del conjunto de prepara el joven entrenador del Bayern. Son muy diferentes, pues por la derecha ataca con un extremo -sin Coman lesionado, será Gnabry o Musiala-, el primero veloz al espacio y el segundo más hábil con el balón al pie por su desequilibrio en el uno contra uno y con un elevado acierto de cara a portería. 

Por la izquierda la cosa cambia, pues Sané que suele partir de la banda, la abandona para ir hacia dentro y participar del juego interior -hizo mucho daño en el último partido que jugaron en el Camp Nou- y deja el carril totalmente libre para las incorporaciones del canadiense Davies. 

Y, finalmente, el otro aspecto a tener en cuenta es el marcaje a Müller y Mané, pues son jugadores indetectables, ninguno referencia, no están en una posición fija ni determinada, sino que aparecen, y eso les hace muy difíciles de controlar debido a que son impredecibles.