El Barça llena Miami

El Barça puede atravesar malos momentos, deportivos y financieros, pero no pierde su carisma. Miami recibió a los blaugrana con los brazos abiertos, con ganas de abrazarse a un club que no pierde su carisma. Cierto es que no está Leo Messi, el futbolista que convierte en oro todo lo que toca, pero el potencial mediático del equipo que dirige Xavi Hernández (que no llegó para sentarse en el banquillo) es enorme y existen pocos en el mundo con él.

La mejor prueba de ello es que, por primera vez en su historia, el Drive Pink Stadium registró un lleno absoluto y ni una sola de las 20.000 localidades con las que cuenta el recinto estuvo vacía. Desde hacía semanas se había colgado el cartel de 'sold out' (no hay entradas) y la realidad es que las gradas estuvieron llenas de aficionados con muchas ganas de ver sobre el césped a los jugadores blaugrana. Nada más llegar el autocar, los miembros de seguridad tuvieron que colocar unas vallas para lograr un pasillo por el que los futbolistas transitaron. A lado y lado, decenas de seguidores pedían imágenes, fotografías y autógrafos.

Una vez sobre el terreno de juego, la gradería se tiñó de blaugrana. Cierto es que las sillas rosas, con los colores del equipo local, invitaban a pensar que había más aficionados del Inter Miami. Nada más lejos de la realidad. La camiseta del Barça era legión por amplía mayoría. Solo había que estar algo atento a las personas, no tanto a las sillas. Eso sí, las grandes pancartas de los aficionados estaban dedicadas a los de Miami y antes del encuentro se cantó el himno de Estados Unidos.