La alineación más rocambolesca de Luis Enrique

Si hay un día que hacer la alineación puede ser un auténtico quebradero de cabeza es este sábado ¿Por qué? Porque hay tantas variables y tantos condicionantes que tome la decisión que tome está asumiendo riesgos. Y desgraciadamente los antecedentes de partidos donde ha asumido mucho riesgos, léase rotaciones, han salido el tiro por la culata. El recuerdo del 1-2 ante el Alavés en el Camp Nou no está tan lejos.

Vamos por partes. Empezaremos por el único sitio donde no hay duda alguna. Bajo los palos estará Marc André Ter Stegen. Con el holandés Cillessen lesionado no hay alternativa que valga. De hecho, tampoco la hay con el holandés recuperado.

En defensa ya empieza la montaña rusa de rotaciones.  Con Sergi Roberto y Jordi Alba lesionados, con Umtiti saliendo de una lesión, con Mascherano cargado de partidos con su selección, y con Aleix Vidal ‘castigado’ al ostracismo, parece más una obra de orfebrería que otra cosa edificar una defensa de cuatro. En cualquier caso todo lo que no sea apostar por Vidal como titular sería ‘matarlo’ directamente y dejarlo ya en galeras para el resto de temporada. Piqué y Digne se erigen como piezas seguras atrás y estaría por ver quién acompaña al futuro presidente del Barcelona, si Mathieu o Umtiti.

En el mediocampo también hay muchas dudas. Iniesta y Busquets han jugado con la selección, Rakitic viene de una lesión y a André Gomes le está costando su adaptación. En cualquier caso, Busquets y Rakitic parecen casi seguros; la duda es quién jugará de interior izquierdo.

Y en el ataque también quedan muchas incógnitas por resolver. Messi apunta que jugará treinta minutos para empezar a coger confianza de cara al partido del miércoles ante el City, Suárez podría quedarse en el banquillo porque está a una tarjeta de la sanción y se perdería entonces el partido en Valencia. Solo Neymar, que volvió antes de tiempo de Brasil por sanción, tiene el puesto asegurado. Sus acompañantes podrían ser Arda Turan, que está en un momento de juego envidiable, y Paco Alcácer, que tiene una necesidad imperiosa de ver puerta cuanto antes y celebrarlo con su afición.