Afellay, una asistencia de tres millones

Fue el único refuerzo de invierno que llegó a ‘Can Barça’ y las lesiones y su aportación en los últimos partidos están justificando su llegada

J.M. Díaz

Ibrahim Afellay podrá afrontar lo que resta de temporada liberado de presión sin el ansia de demostrar que es un futbolista a la altura del `Pep team¿. Su cabalgada por la banda derecha del Santiago Bernabéu, culminada con un excelente centro al primer palo para que Leo Messi remachara el 0-1 en la semifinal de la Champions, es la primera acción del futbolista holandés que quedará grabada en la memoria colectiva blaugrana.

La `gent blaugrana¿ ya empieza a dar por bien invertidos los tres millones de euros que pagó el club en el mercado de invierno al PSV Eindhoven. Su asistencia para el argentino alarga el crédito de un joven que, consagrado en el fútbol holandés con 25 años, ha tenido que adaptarse a marchas forzadas a un estilo tan particular como complicado de asimilar.

Le pasó a Seydou Keita y a Eric Abidal, con excelentes resultados; le ha sucedido a Javier Mascherano, convertido en el `defensa universal¿ de la plantilla en tres encuentros; y no lo consiguieron Alexander Hleb o Zlatan Ibrahimovic. Tocar y moverse para ocupar el espacio en lugar de conducir el balón. Ocupar diferentes demarcaciones con funciones distintas en apenas un minuto.

Afellay, acostumbrado a ser titular indiscutible en el PSV, a ocupar la sala de máquinas del equipo y a estar casi continuamente en contacto con el balón, pasó de la noche a la mañana a esperar una oportunidad. Su polivalencia le permite ocupar diferentes demarcaciones aunque ha sido en las bandas del ataque, a causa de las lesiones de Pedro o Bojan, en donde ha encontrado más opciones. Pese a todo, se desenvuelve mucho mejor en posiciones más retrasadas y centradas en donde la competencia es brutal y debe asimilar que el balón debe correr más que el futbolista. Cuestión de tiempo.