Balonmano

Los dos refuerzos con historia del Barça 2024-25

Juan Palomino y Antonio Bazán son las caras nuevas del vigente campeón de la Champions de balonmano

El andaluz vuelve tras dos años cedido en Logroño y el navarro compaginará el Barça con el Institut Guttmann

Juan Palomino y Antonio Bazán, con SPORT

Juan Palomino y Antonio Bazán, con SPORT / JAVI FERRÁNDIZ

David Rubio

David Rubio

Ya sea por temas económicos o por el convencimiento de que la línea es la correcta, la mejor definición del Barça 2024-25 es continuidad. Ya para el verano que viene vendrá el meta islandés Hallgrimson (Nantes) para suplir el enorme hueco que dejará Gonzalo Pérez de Vargas (Kiel), regresará el extremo izquierdo Dani Fernández (Stuttgart) más la posible 'bomba' de la vuelta de Ludovic Fàbregas del Veszprém.

Y Djordje Cikusa tras su cesión en Montpellier para suplir a Melvyn Richardson (Wisla Plock) sin olvidar que Ian Barrufet está de ‘mili’ en el Melsungen. Los dos únicos refuerzos son el canterano Juan Palomino tras dos temporadas cedido en Logroño y el médico Antonio Bazán (Anaitasuna). Ambos compartieron sus ilusiones y sus inquietudes con SPORT.

Garra por arrobas

El antequerano Juan Palomino dejó el equipo de su municipio en 2020 para jugar en el Barça B, donde brilló y tuvo minutos con Xavi Pascual. Ahora vuelve mucho más hecho de Logroño, donde ha dado pasos adelante a las órdenes de un gran técnico como Miguel Ángel Velasco.

"Todavía estoy en una nube, aunque ahora que me veo entrenando con esta camiseta ya me lo empiezo a creer un poquito más. Es un sueño. Carlos (Ortega) me dice que no deje de ser como soy y que muestre lo que he demostrado estos últimos dos años en Logroño. Me está dando confianza y estoy contento", dijo el lateral izquierdo azulgrana de 24 años.

Juan Palomino y Antonio Bazán, en la Ciutat Esportiva

Juan Palomino y Antonio Bazán, en la Ciutat Esportiva / JAVI FERRÁNDIZ

"Las temporadas son muy largas y las cosas puedan ir cambiando mucho. Ya se irá viendo mi rol, pero bueno, más o menos como en Logroño. Mi punto fuerte es la defensa y en ataque trataré de aprovechar los minutillos que me dejen”, continúa un Juan Palomino que cautiva fuera de las pistas por su expresividad y su naturalidad.

"Ahora soy más maduro en la pista y más sensato sobre todo en los momentos, creo que ya sé tener esa calma. Estos dos años en Logroño me han ayudado mucho. Hemos tenido partidos muy complicados y he sabido tomar responsabilidades", recalcó el andaluz.

Palomino disfrutó como un aficionado más con el bronce de los Hispanos y sueña con vestir esa camiseta. "A mí me encantaría estar ahí algún día, pero para eso tengo que trabajar mucho. Ojalá lo consiga, pero aquí hay que trabajar paso a paso y lo que venga, estupendo. Sería increíble estar algún día en la selección española".

Palomino tiene la confianza de Carlos Ortega

Palomino tiene la confianza de Carlos Ortega / FCB

El antequerano tiene contrato hasta 2025 y viene "sin presión, con la calma de que han confiado en mí. Yo vengo a aprender lo máximo y a tratar de disfrutar en el mejor equipo del mundo. Es como lo de la selección, claro que me gustaría quedarme toda la vida en el Barça. No es decisión mía. Yo solo puedo ayudar a esa decisión a base de trabajo. Lo que sí sé es que el chaval que se vino de Antequera con 20 años estaría superorgulloso de lo que he conseguido y eso es lo más importante. ¿Sabes? Me haría especial ilusión que lleguemos a la Final Four y después que la ganemos, claro".

Un ejemplo único

La historia de Antonio Bazán merecería un libro. Hermano de doctoras e hijo de un cirujano y de una bióloga, Antonio Bazán ha sabido compaginar la dificultad de la Medicina con 11 años en la elite en el Helvetia Anaitasuna más una decena larga de partidos con los Hispanos.

El pivote navarro reforzará al Barça en principio hasta diciembre mientras realiza cuatro meses de estancia obligatoria en el Institut Guttmann de Badalona como paso previo a ser doctor con palabras mayores el próximo verano. "Chapó por él porque es supercomplicado. Y encima rendir al nivel que él ha rendido durante mucho tiempo", alaba Palomino a su compañero.

Bazán admite que la situación "es un poco atípica. Yo sabía desde hace un par de años que tenía que venir aquí unos meses como parte de mi formación como médico residente, me puse en contacto con gente de aquí y al final por una serie de circunstancias (los problemas físicos de Jaime Gallego) me he incorporado a la dinámica del primer equipo. Es un sueño que nunca habría imaginado", explicó un Bazán que tendrá ficha con el primer equipo.

Bazán, un doctor para el balonmano azulgrana

Bazán, un doctor para el balonmano azulgrana / FCB

"Trataré de aportar mis virtudes, que son la intensidad, el dejarlo todo y ser agresivo en defensa. Es el nivel más alto del mundo y quizá no estoy acostumbrado. Estoy feliz por haber podido compaginar la Medicina con el deporte. Es verdad que a veces he renunciado a cosas por los estudios, pero estoy en el Barça gracias a la Medicina. ¡Fíjate qué paradoja! Esa estancia obligatoria me va a permitir entrenarme con gente que admiro mucho", puntualizó.

"Voy a tener que ser muy intenso, muy agresivo y, como ha dicho Juan, intentar tener calma y madurez en ciertos momentos. Yo jugué tres temporadas la Liga Europea con el 'Anaita', pero esto es diferente. Los primeros años casi solo defendía, pero en las últimas cuatro temporadas he atacado y he defendido sobre todo con Quique Domínguez de entrenador y estoy cómodo con ese rol que además me hace más completo," recalca el pamplonica.

Con 15 internacionalidades y excampeón mundial y europeo con los Hispanos Junior, Antonio Bazán ve ahora la selección "terriblemente lejos, para qué nos vamos a engañar. El nivel es muy alto, hay gente que está muy consolidada y gente que ha entrado como Javi (Rodríguez, azulgrana) que tiene un nivel altísimo. Yo sé dónde estoy y cuáles son mis características y obviamente voy a intentar siempre dar lo mejor de mí. Ah, y no me ha extrañado para nada el bronce, porque es un equipazo".