El Madrid no vacila ante un Unicaja respondón

Con 13 puntos y 4/6 en triples, Sergio Llull fue clave para asegurar la trabajada victoria blanca

El equipo que dirige Pablo Laso se asegura el liderato en solitario con una sola derrota

Fabien Causeur se dispone a anotar

Fabien Causeur se dispone a anotar / EFE

EFE

El Real Madrid prolongó este domingo su buena racha liguera y sumó su sexta victoria consecutiva en ACB tras el sonoro KO europeo en el Palau ante el Barça y se mantiene como líder en solitario, ante un Unicaja que, aunque dominó en la primera mitad y solo perdió un cuarto, se vio arrollado por un Sergio Llull en estado de gracia, que acabó tras el descanso con las ilusiones de un oponente que se complica su presencia en la Copa del Rey (79-74).

Real Madrid - Unicaja (baloncesto, Liga Endesa), 12/12/2021

LIGA ENDESA

79
74
Alineaciones
REAL MADRID, 79
(16+15+31+17): Nigel Williams-Goss (5), Fabien Causeur (8), Adam Hanga (14), Tristan Vukcevic, Walter Tavares (11) -cinco inicial-, Thomas Heurtel (5), Rudy Fernández (10), Vincent Poirier (9), Sergio Llull (13), Juan Núñez, Jeffery Taylor (1) y Anthony Randolph (3).
UNICAJA, 74
(19+18+16+21): Norris Cole (3), Jaime Fernández (11), Jonathan Barreiro (9), Tim Abromaitis (2), Micheal Eric (8) -cinco inicial-, Alberto Díaz (3), Francis Alonso (8), Darío Brizuela (4), Rubén Guerrero (6), Carlos Suárez (6) y Axel Bouteille (14).

El balear, que solo había comparecido 17 segundos en los dos primeros cuartos, destrozó tras el paso por vestuarios las esperanzas visitantes en un tercer asalto en el que sus 13 puntos -con cuatro triples incluidos-, tres rebotes, tres asistencias y 17 de valoración espolearon a un equipo que empezó espeso pero que, con un parcial a favor de 31-16 en esos diez minutos, encarriló un nuevo triunfo y dejó atrás su derrota europea en el Palau.

Fabien Causeur, con ocho puntos -la mitad de los de su equipo en los primeros diez minutos-, era el único que lograba percutir el aro visitante. Sus compañeros parecían acusar más la resaca de la derrota ante el Barça y sufrían para superar la barrera defensiva diseñada por Fotis Katsikaris, cuyos jugadores se llevaron sin excesivo brillo el primer cuarto por 16-19, con Jaime Fernández y Jonathan Barreiro como principales argumentos ofensivos, con cinco puntos cada uno.

Como los hombres de Pablo Laso seguían en la reanudación lejos de su mejor versión, el Unicaja se mantuvo por delante gracias a aciertos puntuales y a su dominio en el rebote, algo que a priori no entraba en el guion viendo los precedentes de unos y otros. El líder no terminaba de carburar en ataque aunque, al menos, selló su zona e impidió canastas fáciles a los andaluces, que tampoco andaban sobrados de efectividad (23-26 min 16).

Rubén Guerrero y Walter Tavares, en plena lucha

Rubén Guerrero y Walter Tavares, en plena lucha / EFE

Solo Rudy Fernández con un par de triples maquilló las estadísticas de un desconocido Real Madrid y ofreció argumentos a su equipo para voltear el resultado, aunque los malagueños no se descompusieron y dominaron también el segundo acto. Con un sorprendente dominio en el apartado reboteador (13-24), los visitantes se fueron al descanso con un 31-37 a favor y sus ilusiones intactas en busca de la sorpresa en el WiZink Center.

Pablo Laso tiró de Llull, una de sus armas favoritas, para cambiar el panorama y la estrategia volvió a darle resultado. Cuatro puntos seguidos del balear tras su feísimo gesto en el Palau por el que se ha disculpado y el primer triple de Anthony Randolph ante su afición, casi un año después de su lesión, devolvieron mucho tiempo después la ventaja a los blancos.

Un parcial en contra de 11-2 en menos de tres minutos obligó a Katsikaris a parar el partido para intentar frenar la pájara de los suyos, que abusaban de individualismo y empezaban a dar síntomas de impotencia, pero tres mates seguidos de Tavares despertaron a la grada y, en mitad de la fiesta, Llull castigó con otro triple la desidia malagueña en defensa.

Sin concesiones entre Micheal Eric y Vincent Poirier

Sin concesiones entre Micheal Eric y Vincent Poirier / EFE

El panorama era bien distinto, con el Real Madrid dominando ya el marcador en el ecuador del tercer acto (50-45). Diez puntos del balear y nueve del caboverdiano en siete minutos cambiaron el choque definitivamente. Durante unos instantes, los cajistas respondieron con acciones aisladas que evitaron la escapada local, pero una mandarina de Llull sobre el límite de la posesión marca de la casa y su cuarto triple sin fallo hicieron mucho daño y dejaron el panorama despejado para los últimos diez minutos (62-53, min 30).

Las tendencias se mantuvieron hasta el final. El Real Madrid seguía creciendo y el Unicaja, al verse sin opciones, siguió bajando sus prestaciones al comprobar cómo su buen trabajo de la primera mitad se esfumaba ante un rival en el que jugadores como el exazulgrana Adam Hanga siguieron abriendo hueco hasta el 79-74 final.

El duodécimo triunfo blanco consolida su liderato y obliga a los malagueños, que hoy echaron en falta a Abromaitis y a Brizuela -dos de sus hombres más en forma-, a no fallar en sus próximos compromisos si quiere clasificarse para la Copa del Rey.