Ganar al Bayern en el Palau, única opción para el Barça

Ya no hay más oportunidades. El Barça se juega este martes en el Palau (20.00) el pase a la Final Four de Belgrado, en un partido de alta tensión, especialmente para los blaugranas, que no pueden fallar ante su afición tras una serie irregular ante el Bayern Múnich.

Atrás quedan los cuatro partidos de esta serie de cuartos de final, donde cada equipo ha tenido el control en dos partidos, uno en casa y otro fuera. Ahora, con el mejor record de la temporada regular, el Barça se ha ganado el derecho de decidir la eliminatoria en el Palau.

Tras reconocer que le avergonzó la actuación de sus jugadores en el cuarto partido, Saras Jasikevicius espera que sus jugadores demuestren ante su afición el equipo demoledor, y pleno de confianza que les llevó al mejor record (21-7) y el mejor registro en el triple (41,3%).

Pierden fuelle

Unas semanas después, los azulgranas se encuentran en una fase inestable de juego y de confianza que les ha llevado a las dudas ante un equipo alemán inferior en talento, pero que ha sabido exprimir esa debilidad mental del Barça.

Si el conjunto azulgrana quiere volver a la Final Four en apenas dos semanas, que es donde le corresponde, deberá mostrar su mejor versión, comenzando por defender desde el primer minuto, aunque también anotar con facilidad, cosa que no ha logrado en esta serie.

En estos cuartos, el acierto en el triple ha caído al 29,2%, el peor de los ocho equipos en los play-offs, anotando de media apenas siete triples por partido. Un bagaje demasiado pobre y al que deben contribuir jugadores como Kuric (3 de 20) o el propio Mirotic (5 de 16).

Buena dirección de juego, imprescidible

La dirección de juego es básica en los esquemas de Saras. Para ganar con solvencia al Bayern, el equipo necesita la mejor versión de sus directores, comenzando por Calathes, con Laprovittola y los minutos de Jokubaitis. Control del ritmo y pocas pérdidas, clave en este Barça.

Finalmente, los interiores blaugranas con Davies, Sanli y Smits, han de controlar el rebote, intimidar en la pintura y aportar ofensivamente en los balones interiores que puedan recibir para lograr buenos espacios exteriores para lanzar.   

Trabajo acumulado para este Barça que no puede fallar en casa. En juego, toda una temporada en la Euroliga, que no puede finalizar abruptamente en los cuartos de final. Ganar o ganar, ese el objetivo.