No es fácil comer en un restaurante japonés... en Japón

Hay que elegir bien, son caros, no todos tienen la carta en inglés y hay que aprender unas normas

"Pues a mí me gusta comida japonesa. Conozco un japonés al que voy una vez al mes", me lo comentaron muchas veces en los días previos al viaje. Pues nada, aquí podrían comer japoneses cada día. Si superan algunas barreras, por supuesto. La primera es el precio. Los restaurantes japoneses son muy caros, más que en España aunque, desgraciadamente, nuestros precios ya tienen poco que envidiar a los de cualquier país. La segunda, elegir porque no en todos los sitios las cartas están en inglés y pedir a ciegas acostumbra a ser un problema a poco que uno quiera saber lo que come. Después hay que decidir si se prescinde o no del vino (depende del presupuesto) y escuchar alguna recomendación; por ejemplo, no se le ocurra nunca clavar los palillos en la comida: ¡significa la muerte! Con todo ello y unas pocas cosas más (como toallitas que se entregan a menudo para que te limpies las manos) ya se puede preparar para degustar una típica comida japonesa... en Japón.

Los ingredientes frescos son esenciales. El arroz, por supuesto. También el pescado. El primer plato que se conoce (tempura) fue introducido en el siglo XVI por comerciantes japoneses y es el principal, mucho más que el popular sushi (lonjas de pescado crudo puestas encima de pequeñas porciones de arroz sazonado con vinagre) y hasta del sashimi, que son simplemente lonchas de pescado crudo. La carne no forma parte de la dieta tradicional japonesa, pero se puede pedir un yakitori (pincho de pollo asado) o un sukiyaki (carne de vaca cocinada con verduras. Para beber, por supuesto, sake (vino hecho de arroz) o té verde (ocha) y para licores (shochu), trabajado con malta de arroz.

Si el restaurante es de un cierto lujo no saldrá por menos de 15.000 yens (unos 120 euros) y si se desciende de categoría -y de calidad- degustar la comida japonesa en Japón puede quedarse en unos 80 euros. Eso sí, no pueden dejar propinas por muy servicial que hayan sido los japoneses que le hayan atendido.

Las hamburguesas ganan terreno

Evidentemente, también se puede comer de otra manera porque hay todo tipo de cocina, comenzando por la china y acabando por la francesa... si el bolsillo lo permite. Entre las comidas internacionales favoritas están, además de los platos chinos, la barbacoa coreana, el curry, los espaguetis y la pizza. Pero lo que se está imponiendo en los últimos años son... ¡las hamburguesas! La gente joven acude a las muchas -con franquicia estadounidense o locales- que hay distribuidas por las ciudades. También se pueden encontrar en cualquiera de los establecimientos abiertos los 24 horas patatas fritas, emparedados de salchichas, pinchos de todo tipo y hasta pulpo servido en bolsa. Toda una variedad.