El Barça está obligado a fichar por las lesiones y un calendario NBA

El Barça Lassa superó el <strong>Tel Aviv</strong> un test de envergadura en la Euroliga y este domingo llegará al Palau el Real Madrid en la Liga Endesa. Una semana de aupa...como lo han sido las pasadas y serán las siguientes en una temporada 'non stop' para los equipos que, como el Barça, disputan la máxima competición continental, que este ejercicio ha variado su formato

Tomando al club azulgrana como referencia, los números adjuntos no mienten. Un jugador barcelonista, teniendo en cuenta todos los torneos oficiales en juego, podría acabar disputando un máximo de 89 encuentros esta temporada. Eso teniendo en cuenta que llegara a todas las finales y agotara al límite las respectivas series de play-off. 

Vaya, que un integrante de la plantilla de Georgios Bartzokas podría jugar siete partidos más que los integrantes de las 14 franquicias de la NBA que quedarán fuera de los play-off, teniendo en cuenta que la fase regular de la liga profesional estadounidense consta de 82 jornadas.

Un nuevo panorama competitivo...que ha coincidido con una auténtica plaga de lesiones en el colectivo azulgrana. A día de hoy son baja de larga duración Pau Ribas y Shane Lawal mientras se espera poder recuperar en breve a Juan Carlos Navarro y Justin Doellman. La única buena noticia, a día de hoy, ha sido el retorno de Petteri Koponen, ya restablecido del traumatismo craneoncefálico que sufrió en un accidente automovilístico.

Fichajes y condicionantes

Con los percances de larga duración ya comentados de Ribas y Lawal, la plantilla del primer equipo ha quedado reducida a once efectivos -incluyendo a Vezenkoz que evoluciona con ficha del Barça B, lo que se antoja un elenco muy corto para afrontar la Euroliga y la Liga Endesa. En este sentido, el general manager azulgrana Rodrigo de la Fuente lleva unas semanas rastreando el mercado de fichajes tanto a nivel de agentes libres de NBA, como el mercado europeo. Dos ahora son los objetivos: un jugador de perímetro y otro interior.

Una búsqueda que está definida por dos condicionantes. El primero es el económico. Se intenta buscar jugadores que estén libres en el mercado para evitar pagar claúsulas de rescisión, que produzcan una desviación en el presupuesto de la sección. Un presupuesto que se mueve en parámetros similares a los de la pasada temporada (unos 24 millones de euros). Una decisión que está en manos de la directiva del club.

La otra cortapisa es el hecho que, de cara a las competiciones ACB, el Barça Lassa ya tiene cubiertas las dos plazas de extracomunitario (Doellman y Dorsey) por lo que el escenario ideal sería concretar un fichaje con pasaporte europeo -lo que reduce el margen de búsqueda- para evitar inoportunas rotaciones.

El dilena está sobre la mesa. De la Fuente trabaja a marchar forzadas para encontrar los ansiados refuerzos a la mayor brevedad posible. Y la evidencia es que hace falta fichar.

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