Abby Bishop, una activista por los derechos de las madres deportistas

La australiana es la nueva estrella del Hozono Jairis de la Liga Endesa femenina

Se enfrentó a su federación porque no la dejaban acudir a las concentraciones con su hija

Ganó la batalla y logró un derecho que ahora disfrutan todas las jugadoras madres

Abby Bishop, en su presentación oficial con el Hozono Global Jairis

Abby Bishop, en su presentación oficial con el Hozono Global Jairis / Juan Carlos Caval

Dioni García

El Hozono Global Jairis ha construido esta temporada un equipo ambicioso. No quiere limitarse a luchar por la permanencia. Quiere dar un paso más en su segunda temporada en la Liga Femenina Endesa. Y para ello ha incorporado jugadoras con experiencia internacional como es el caso de la australiana Abby Bishop, una ala pívot de 1,89 metros de estatura y 34 años de edad (nació el 29 de noviembre de 1988) que será un referente tanto dentro como fuera de la pista por su capacidad de liderazgo. 

LUCHA POR LA IGUALDAD

Bishop cuenta con un extenso palmarés. Ya conoce España por su paso por el Uni Girona, en 2020, donde coincidió con Eric Surís, su entrenador en Alcantarilla. Pero al margen de sus éxitos deportivos, la australiana es una activista que lideró en 2013 una reivindicación para las mujeres deportistas. Cuando tenía 23 años decidió adoptar a la hija que había tenido su hermana Zala. Su vida cambió de la noche a la mañana. Entonces ya era internacional con Australia, había ganado la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y el anillo de la WNBA en 2010 con Seattle.

Cuando llegó el verano y la nueva concentración del equipo, quiso que la acompañara su hija, que solo tenía unos meses de vida. Su sorpresa fue que la Federación de su país no se lo permitió y por ello renunció a jugar. “Siempre me pronuncié contra la política parental. No lo hice por mí, porque sabía que en ese momento no me iba a beneficiar, pero era importante para el futuro”, explicaba en una entrevista la ala pívot, quien consiguió con su postura cambiar esa norma absurda que impedía a las madres baloncestistas poder cuidar de sus hijos durante las largas concentraciones. “Si no hubiera tomado esa decisión y dejado la selección, probablemente no habrían cambiando las cosas. Ahora todas las mamás pueden jugar en la selección y en la liga de mi país y tener a sus hijos al lado”, explicaba. 

"NO TENGO NADA QUE DEMOSTRAR"

Bishop “es de esas jugadoras que hace mejor al resto”, dice Surís, quien está encantado con la incorporación de una ala pívot con experiencia en Estados Unidos, Francia, Hungría, Rusia e Italia que destaca por su capacidad para leer el juego. Y conocer al técnico gerundés ha sido clave para su fichaje por el club de Alcantarilla. “He elegido este club porque obviamente conozco al entrenador de una etapa en Girona y disfruté allí. Me encantaron sus valores en el baloncesto y como persona. Estoy en el final de mi carrera y tengo poco que demostrar, por lo que es más importante estar rodeada de buenas personas y disfrutar, porque cuando disfrutas acabas ganando partidos”, ha dicho en Murcia en su presentación oficial en el concesionario de la firma GouGo, que vuelve a ser patrocinador del club.

"BUENA MEZCLA DE VETERANAS Y JÓVENES"

La australiana ha exteriorizado con sus palabras la ambición de esta temporada del Hozono Jairis: “Tengo buenas sensaciones, hay un buen grupo. La pretemporada siempre es complicada, pero somos positivas y creemos que el primer partido en la pista del Movistar Estudiantes es una buena prueba para nosotras”, ha manifestado una jugadora que considera que en la plantilla “tenemos una buena mezcla de veteranas y jóvenes. Las más experimentadas encontramos la forma de trabajar juntas. Obviamente tenemos un gran staff de entrenadores y nos ayudarán, pero al final esto es baloncesto. Tenemos que entrenar las tácticas y con el paso de las jornadas seremos mejores”.

“Mi objetivo personal es hacer todo lo que necesite el equipo para ganar, ayudar a ganar partidos reboteando o siendo una buena líder. No tengo grandes metas, solo que el equipo gane”, ha terminado diciendo Abby Bishop, quien enarboló la bandera por los derechos de las mujeres deportistas que esta temporada dejará su impronta en el Hozono Global Jairis.