Youssoupha Fall: ¿Cómo juega y por qué el Barça apuesta por él?

El pívot franco senegalés aterriza en el Palau Blaugrana para acabar de completar la nómina de jugadores interiores

Pese a su enorme envergadura, Fall destaca más por su toque cerca del aro que por sus aptitudes defensivas

Fall en un partido con ASVEL

Fall en un partido con ASVEL / ANDREJ CUKIC

Nil Jaimejuan

Nil Jaimejuan

El Barça dio carpetazo al mercado de fichajes veraniego con la incorporación de Youssoupha Fall al equipo, quinta y definitiva alta para la renovada plantilla de Joan Peñarroya, que tomará el relevo de Roger Grimau en el banquillo azulgrana de cara a la próxima temporada.

Después de hacer oficial a Kevin Punter, Justin Anderson, Juan Núñez y Chimezie Metu, la secretaría técnica azulgrana quiso poner la 'guinda' con Fall, una torre gemela de 221 centímetros con experiencia en Euroliga con Baskonia y ASVEL, equipo en el que ha militado las tres últimas temporadas. Tras finalizar contrato con el equipo francés, el Barça echó sus redes sobre él y en cuestión de días cerró su llegada.

'OVERBOOKING' EN EL PÍVOT

Con el senegalés de 29 años, el Barça completa su nómina de jugadores interiores, una zona en la que presumiblemente podría haber un 'overbooking' en una de las dos posiciones. Jabari Parker será el titular en el ala-pívot y se espera que de continuidad a su primer gran año en Europa; como relevo tendrá al chico nuevo, Chimezie Metu, una apuesta interesante que podría tener minutos también en el '5'. Es aqui, en la pintura, donde Peñarroya tendrá mucho para elegir. Con Willy Hernangomez y Jan Vesely como 'cincos' titulares, la entrada de Fall en esta rotación es todavía una incógnita. El nacido en Dakar es un 'gigante' y exhibe su mejor juego cuando está solo en la zona, por lo que se antoja difícil que pueda compartir cancha con el español y el checo. Veremos como se adapta Fall a un rol de tercera opción, ya que viene de ser un fijo en el quinteto inicial de ASVEL, donde rozaba los 20 minutos por encuentro.

LEJOS DE SER UN ANTI-TAVARES

Cuando el Barça anunció el fichaje de Fall, muchos aficionados justificaron su llegada como un plan 'Anti-Tavares', un jugador que está acostumbrado a castigar a los azulgranas en duelos directos, quizás el interior más dominante de la última década en el viejo continente. Sin embargo, y pese a su envergadura y capacidad de intimidación, Fall no es necesariamente un pívot especialista en anular al 'gigante' rival, de hecho, se desarrolla mejor en ataque que en defensa. Ya en Baskonia quedó demostrado que sufría ante perfiles como el de 'Edy', y en sus tres años en Francia no ha demostrado mejorar notablemente en este aspecto. Su 2'21 le permiten condicionar las penetraciones de los rivales, aunque nunca ha destacado por su 'timing' de salto o instintos defensivos.

Moustapha Fall ataca a  Youssoupha Fall en un partido de Euroliga

Moustapha Fall ataca a Youssoupha Fall en un partido de Euroliga / EFE

El franco senegalés cumple con el prospecto de pívot clásico y se espera que pueda aportar en facetas parecidas a las de Nnaji, pero con más experiencia y toque cerca del aro que el joven canterano culé. Fall tiene buen toque de balón cerca de canasta y puede llegar a ser un quebradero de cabeza para el equipo rival cuando se encuentra cómodo en pista. Lo demostró ante el Barça en la 22/23 cuando hizo su récord de anotación en Euroliga, con 23 puntos, sin olvidar los 15 puntos y 8 rebotes que le endosó a los de Grimau el pasado mes de abril. No tiene las habilidades de Vesely en el 2vs2 y ni capacidad de tiro en la media o larga distancia, aunque si puede cargar muy bien el rebote y sumar en acciones de segunda oportunidad. Tampoco es un jugador especialmente rápido en transiciones, por lo que Peñarroya tendrá que plantear un juego más lento y pausado cuando tenga a Fall en pista.

OPCIÓN DE MERCADO

El exbaskonista es una oportunidad de mercado para este Barça, que andaba buscando en el mercado un tercer pívot 'low-cost' para acabar de cerrar la plantilla. Con un ASVEL-Villeurbanne que deambulaba por la Euroliga sin un rumbo claro, Fall promedió 8.8 puntos y 6.6 rebotes en 19.7 minutos, números interesantes para un equipo que acabó como uno de los peores ataques del torneo. Peñarroya y su staff técnico ya trabajan para maquetar un equipo competitivo para la próxima temporada.