El plan Higgins funciona

Poco a poco, con el paso de las jornadas tanto de Liga Endesa como de Euroliga, Cory Higgins está volviendo a ser el jugador decisivo de la temporada 2019-20, cuando aterrizó en el Palau cumpliendo con las expectativas que generó su fichaje.

Sin embargo, la pasada campaña las lesiones no le respetaron y Sarunas Jasikevicius apenas pudo contar con el escolta estadounidense, que está encantado en el Barça y con su vida en Barcelona.

El club, en connivencia con el jugador, trazó un plan para que el jugador, que primero sufrió serios problemas en la espalda y unos meses después tuvo que pasar por el quirófano para intervenirse de una fascitis plantar, se incorporara al equipo de forma progresiva esta temporada para evitar posibles recaídas. 

“Tenemos que poner cuatro cupos y descartar a alguien. Nuestro staff médico siempre me pide que, si es posible, Cory juegue los menos partidos posibles. Tenemos un plan, hemos hablado con él y está de acuerdo”, explicó el entrenador del Barça, Sarunas Jasikevicius, el 2 de octubre, tras varios partidos en los que no contó con Higgins.

No fue hasta la semana siguiente cuando el escolta azulgrana empezó a tener minutos en la pista, arrancando en el duelo en el Palau ante el Olympiacos (70-80).

En los primeros partidos, el rendimiento del jugador no fue el esperado. Se le veía falto de competición, lejos de su mejor forma física y un poco desubicado con sus compañeros. Era algo que ya contemplaba el plan trazado por el staff técnico y el staff médico, siempre pendiente de la respuesta del pie izquierdo del jugador. Jasikevicius optó por forzarle un poco dándole una media de 19,6 minutos por partido en Liga Endesa (sin contar las dos primeras jornadas en las que no jugó), y 16,5 en Euroliga siendo el último partido, ante el Fenerbahçe, donde jugó menos con 8 minutos ya que Jasikevicius le dio un respiro después de un mes de octubre sumamente exigente.

Más protagonismo

En los últimos partidos del Barça -excepto ante Fenerbahçe donde entró en las rotaciones- Higgins se convirtió en un líder más del equipo, sobre todo ante el Bàsquet Girona y ante el Olimpia Milan donde dirigió al Barça con maestría y fue determinante abriendo las defensas para facilitar las canastas de sus compañeros. A la espera del regreso de Niko Mirotic y de Kayle Kuric, que ya tiene el alta médica, la recuperación de Higgins es la mejor noticia para un Barça en ascenso constante.  

Mirotic lo da todo por volver pronto

El club ha avisado de que no forzará en ningún momento el regreso de Nikola Mirotic, pero la realidad es que el hispano-montenegrino está ya en la recta final de su recuperación de las molestias del talón de Aquiles. El pasado domingo, el propio club ofreció unas imágenes del jugador entrenando en solitario en el Palau con mucho balón en los ejercicios. En el trabajo sin balón, se le puede ver también haciendo rutinas exigentes y en ningún momento se denota que haya molestia alguna. El propio jugador es el primero que tiene muchísimas ganas de regresar y poder ayudar a sus compañeros y de momento el club asegura que los plazos se están cumpliendo, aunque sigue sin dar una fecha de regreso para el ala-pívot.