Los múltiples cambios de Willy Hernangómez

El madrileño pasará de jugar 12 minutos de media y de ‘banquillazos’ en los Pelicans a ser clave para Roger Grimau

El pívot deberá acostumbrarse a que sus rivales se ‘planten’ en el medio de la zona como Edy Tavares en el Real Madrid

El presidente Joan Laporta, con Willy Hernangómez

El presidente Joan Laporta, con Willy Hernangómez / INSTAGRAM

David Rubio

David Rubio

El Barça con Juan Carlos Navarro a la cabeza y Willy Hernangómez apostaron muy fuerte el pasado verano por una relación tan ilusionante como arriesgada por los dos bandos. Huérfano de un gran nombre propio desde el tortuoso adiós de Nikola Mirotic (sobre todo) y de un Cory Higgins que llevaba demasiado tiempo lastrado por las lesiones, el club hizo un esfuerzo por repatriar al pívot madrileño tras siete años en la NBA en los que su protagonismo ha sido guadianesco mientras marcaba diferencia cada verano con Sergio Scariolo.

De forma paralela, a sus 29 años Willy prefirió la estabilidad del Barça a vivir otro año duro en la NBA como ha sucedido en las tres últimas temporadas en los Pelicans. En Nueva Orleans incluso después de notables actuaciones Willy Green lo premió con recurrentes e inexplicables ‘banquillazos’, como sucedió después de los 22 puntos y 16 rebotes que logró el 4 de febrero de 2022 frente a Sacramento.

Muchos más minutos

El primer gran cambio que vivirá Willy Hernangómez en el Barça será su rol. El protagonismo del pívot en la ciudad más poblada de Luisiana ha ido bajando de los 18 minutos por partido de la temporada 2020-21 a los 16,8 de la siguiente y a tan solo 12,1 en la pasada con más de la mitad de partidos sin jugar ni un segundo.

Willy Hernangómez, frente a Vincent Poirier en la Supercopa

Willy Hernangómez, frente a Vincent Poirier en la Supercopa / EFE

Pues bien, el madrileño pasará de vivir desde el banquillo tres partidos en una misma semana a tener que ser uno de los jugadores más utilizados e importantes para Roger Grimau en esas jornadas con tres compromisos. Y como Svetislav Pesic no tenía razón cuando aseguraba que un jugador puede estar en forma y preparado solo con entrenamientos, Willy tendrá que adaptarse a esta nueva realidad.

La ciudad y las normas

El azulgrana no se instalaba en una ciudad tan ‘europea’ como Barcelona desde que dejó la gigantesca Nueva York en febrero de 2018. Desde entonces, un año y medio en la insípida Charlotte (Carolina del Norte, 796,000 habitantes) y los tres últimos en la Nueva Orleans de la emblemática Bourbon Street (400.000).

En España, Willy vivió en Madrid hasta los 22 años con la excepción de los cursos 2013-14 y 2014-15 que estuvo cedido en Sevilla). Ahora Barcelona es la realidad para la nueva figura barcelonista.

Aunque su firme compromiso con la selección española lo ha llevado a ser fijo en cada competición, no es menos cierto que el mayor de los Hernangómez ha crecido en la NBA y en unas normas que ‘benefician’ a los interiores.

Willy Hernangómez, en su presentación con el Barça

Willy Hernangómez, en su presentación con el Barça / JAVI FERRÁNDIZ

Por decirlo de otra forma, Willy no está acostumbrado a que un ‘gigante’ como Walter Tavares se plante en la zona y reparta tapones a diestro y siniestro. Los tres segundos defensivos liberan mucho la ‘pintura’ y facilitan el juego en el poste bajo o las penetraciones tras finta desde las inmediaciones del poste alto.

Primera muestra

El hijo del exjugador Guillermo Hernangómez y de la leyenda de la selección femenina Margarita ‘Wonny’ Geuer se incorporó a los entrenamientos con Roger Grimau el 9 de setiembre y tan solo dos días después debutó en las semifinales de la Lliga Catalana ante el Bàsquet Girona.

El madrileño anotó seis puntos, atrapó cuatro rebotes defensivos y valoró +4. Al día siguiente en la final contra el Manresa se quedó en +3 pese a sus nueve rebotes. Y cuatro días más tarde en las ‘semis’ de la Supercopa contra el Madrid valoró -3 con un 0/6 en tiros de dos.

Willy debutó como azulgrana en la Lliga Catalana

Willy debutó como azulgrana en la Lliga Catalana / DANI BARBEITO

Después de una semana de trabajo con el equipo en la que mejoró mucho su aclimatación a sus compañeros y a los sistemas del técnico, Willy brilló en el tercer cuarto contra la Penya y acabó con 10 puntos, seis rebotes y +12. Es evidente que seguirá yendo a más.

Se acerca el duelo contra su hermano

El pasado verano se especuló con la posibilidad de que los dos Hernangómez coincidiesen en el Barça y pudiesen compartir vestuario, algo que solo han hecho con la selección española absoluta y en la sub’20 que fue plata el Eurobasket de Grecia’14. “La verdad es que es un sueño que siempre hemos tenido, el de jugar juntos, el de competir por títulos juntos”, comentó Juancho a mediados del mes de julio.

Willy y Juancho solo han jugado juntos con España

Willy y Juancho solo han jugado juntos con España / FEB

Al final el menor de los Hernangómez fichó por Panathinaikos que dirige el turco Ergin Ataman (dos veces campeón de la Euroliga con el Anadolu Efes) y el primer duelo entre hermanos llegará en poco más de un mes. El Barça recibirá el 3 de noviembre en el Palau al conjunto del trébol con Juancho y Willy frente a frente.