Jabari Parker, la estrella (todavía) invisible del Barça

Jabari Parker llegó al Barça este verano como toda una ex estrella de la NBA y todo el mundo esperaba que su impacto en el equipo seria inmediato por su talento y su facilidad anotadora.

Aunque en estas primeras semanas de la competición, el jugador de Chicago de 28 años está realizando un proceso de adaptación lento, como tratando de absorber todo lo que significa dar el salto de la NBA a Europa tras una exitosa carrera profesional en la liga estadounidense. Las dudas sobre su estado fisico ya las ha disipado pero su aportación al juego sigue 'stand by'.

Y para la mayoría, incluido Parker, no acostumbra a ser un camino fácil como está descubriendo a cada partido que pasa. Sus actuaciones hasta el momento están siendo discretas, y en algunos momentos, ni tan siquiera tiene protagonismo. Algo debe cambiar.

Una transición complicada

Si a Willy Hernangómez le costó arrancar para finalmente dar ese paso al frente en el primer duelo de Euroliga ante el Anadolu Efes, a Parker todavía se le espera.

El Barça y su póker de fichajes "para luchar por todos los títulos"

No está siendo una transición fácil para Parker aunque sus compañeros tratan de involucrarlo en el juego con buenas asistencias o buscando sus lanzamientos exteriores. Un par de mates espectaculares y algún triple al límite han sido sus mejores argumentos hasta el momento.

Pero lo cierto es que se espera mucho más del estadounidense, que tiene una mano privilegiada en el tiro, aunque no lo ha podido demostrar de manera regular.Su mejor actuación ofensiva en Liga Endesa fue en el primer encuentro ante el Joventut, donde anotó tres triples para un total de 13 puntos.

Poca aportación para una estrella NBA

Ante el Zunder Palencia se quedó en ocho y ante el Madrid, otros siete. En el sufrido encuentro ante el MoraBanc Andorra, volvió a tener una aparición discreta con solo dos puntos. Demasiado poco para una estrella NBA.

Con un carácter tranquilo, tirando a introvertido, en el vestuario están convencidos que el jugador acabará dando el salto de calidad que se espera. Y también lo piensa el propio técnico, Roger Grimau, que está administrando sus minutos para que poco a poco vaya cogiendo confianza sin ‘quemarlo’ demasiado.

Pero a un jugador de su nivel hay que exigirle mucho, y posiblemente necesite un partido con mucho protagonismo para que empiece a sentirse una pieza imprescindible de este Barça, que necesita de su mejor versión si quieren llegar lejos en todas las competiciones.