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La 'caída' de Jokubaitis en el Barça: de 'Rookie del año' a descartado

El lituano ya es historia en el Barça de baloncesto, club al que llegó en 2021 como uno de los jóvenes más prometedores de la Euroliga

La inconsistencia en su tiro y su poca evolución en pista han acabado dictando sentencia sobre Rokas Jokubaitis

Jokubaitis no ha sido el jugador que esperaban en el Barça

Jokubaitis no ha sido el jugador que esperaban en el Barça / Javi Ferrándiz

Nil Jaimejuan

Nil Jaimejuan

El paso de Rokas Jokubaitis en el Palau Blaugrana ya es historia. Este martes el Barça anunció el acuerdo de desvinculación por el lituano, que no cumplirá el año de contrato hasta 2025 que le quedaba, por lo que el base es libre de firmar por cualquier equipo.

El chico de 23 años, que no ha cumplido las expectativas en las tres temporadas que se ha enfundado la elástica azulgrana, ya pone la directa para acabar de cerrar su próximo capítulo en el baloncesto. Ha disputado este verano la Summer League de la NBA con los New York Knicks y ha declarado abiertamente su afán de cruzar el charco, aunque las opciones más realistas parecen estar en Europa, con Zalgiris y sobre todo Maccabi Tel Aviv al acecho.

Una joya 'estrellada'

La realidad es que en los despachos azulgranas esperaban más de Rokas cuando lo firmaron en verano de 2021 procedente de Zalgiris. En el conjunto lituano, Jokubaitis se convirtió en una de las 'perlas' más prometedoras de la Euroliga, llegando a cosechar 53 partidos oficiales de la máxima competición a los 20 años. Además, aterrizaba en el Palau con el 'sello' de Sarunas Jasikevicius, su entrenador en Kaunas y que más tarde se lo llevaría al Barça como parte de su proyecto.

Jokubaitis pasó revisión médica con el Barça, a la espera que se incorpore este año

Jokubaitis firmó por el Barça en 2021 / FCB

Con la marcha de Leandro Bolmaro a la NBA, donde fracasaría estrepitosamente, el club catalán se hizo con los servicios de Rokas para apuntalar la posición de base junto a Laprovittola, que llegó también ese verano. El lituano, en su primera temporada como azulgrana, ofreció buenas sensaciones en pista e incluso llego ganar el premio de 'Rising Star' de la Euroliga, que acredita al mejor joven de la competición, con unos promedios de 7.0 puntos y 3.0 asistencias en casi 18 minutos. Se le veían buenas maneras en la dirección de juego y la gestión del ataque, virtudes por las que había destacado en las categorías inferiores de Zalgiris y la selección lituana, aunque su progresión se estancó a partir de ahí.

Caída de rendimiento

El jugador nacido en Mažeikiai, Lituania, no consiguió seguir evolucionando como jugador en las dos siguientes campañas, el motivo principal por el que el Barça ha tomado ahora la decisión de prescindir de sus servicios. Thomas Satoransky llegó en verano de 2022 desde la NBA y sumó competencia en el exterior, quitándole minutos a un Jokubaitis que empezaba a quedar relevado a un rol más secundario.

Sería injusto calificar de fracaso su paso por Barcelona. Rokas ha tenido momentos de brillantez en los que ha sido capaz de demostrar su enorme talento, como los 22 puntos en octubre de 2021 ante Bilbao Basket , los 16 puntos ante Efes en enero de 2022 o su enorme desempeño en la Copa del Rey de 2023, haciéndose con el título y opositando por un MVP que se acabó llevando Mirotic. La cosa se quedó en solo 'chispazos' de talento.

Jokubaitis penetra ante la oposición de Mark Smith

A Jokubaitis le ha costado evolucionar su juego en Barcelona / EFE

En cualquier caso, ha sido el poco crecimiento como director de orquesta el que ha acabado dictando sentencia sobre Jokubaitis, un jugador que este último curso 23/24 no ha tenido peso en la plantilla de Roger Grimau y que, tras la llegada de Ricky Rubio, cayó todavía más en la rotación. En Liga Endesa promedió 7,4 puntos, mientras que en Euroliga firmó 5,6 y 2.4 pases a canasta.

Jokubaitis, que nunca se caracterizó por ser un fantástico creador tras bote, tampoco ha conseguido encontrar regularidad en su tiro, por lo que no era de extrañar ver a las defensas 'flotarlo' en algunas situaciones. Peca de ser un jugador demasiado zurdo y fácil de predecir, aunque su faceta organizativa sí que es de primer nivel. A sus 23 años, todavía le queda mucho baloncesto para ofrecer y veremos como mejora sus debilidades en un futuro. Apunta a Maccabi Tel Aviv, equipo con el que habría llegado a un acuerdo para las próximas tres temporadas.