¿Cómo sacarse el carnet de conducir?

¡Felicidades! ¿Acabas de cumplir los 18 años y quieres sacarte el carnet? O... ¿Hace muchos años que lo quieres y has decidido dar el paso? Sea como sea, en Motor Zeta nos hemos propuesto hacer esta lista de pasos para sacarse el carnet de conducir. Se trata de un reto con muchos trámites incorporados, pero que si los conocemos al detalle, puede ayudarnos a hacernos la tarea más fácil.

Recurda, ante todo, que hay unos requisitos previos para sacarse el carnet que tiene que cumplir todo conductor en España: hay que ser residente español(a), tener 18 años (o 17 e iniciar un poco antes las clases teóricas), contar con las aptitudes psicofísicas requeridas, y ser declarado apto por la Jefatura Provincial de Tráfico en las pruebas teóricas y prácticas.

El proceso total es de unos 6 y 7 meses, y el coste medio son de unos 720 euros, que pueden variar mucho según la región y las aptitudes de cada uno.

1. PONER A PUNTO LA DOCUMENTACIÓN

Como ya anticipábamos, se requiere diversa documentación para sacarse el carnet de conducir en España. Por eso, deberemos tener a punto lo siguiente: el DNI (o NIE), una fotografía de carnet (32 x 26 en color), impreso de solicitud de pruebas de aptitud de la DGT, una declaración escrita donde se establezca que no tiene ningún tipo de restricción judicial para conducir, y una declaración de no ser titular de otro permiso de conducir de la misma clase obtenido en otro país de la Unión Europea.

¿Te acabas de asustar? No te preocupes: de mucha de esta documentación se encarga la autoescuela y te dirá como conseguir lo que necesitas.

2. BUSCAR UNA AUTOESCUELA

Es por eso que nos interesa encontrar una buena autoescuela. Siempre es importante la opinión de amigos y familiares, pero también es importante tener en cuenta aspectos personales.

Por ejemplo, ¿nos vamos a mover por tramos interurbanos o por ciudad? Mucha gente se apunta a las autoescuelas de las grandes ciudades aunque vivan en pueblos y no vayan a circular por ellas, ya que allí las prácticas suelen ser más baratas. Pero ojo: las prácticas necesarias para subir a examen en las grandes ciudades suelen ser más que las que se necesitan en los pueblos.

Solicita información sobre los horarios de clases teóricas y prácticas, y mira si te convienen o no. Solicita también un presupuesto por escrito y haz una comparativa. 

También existe la opción de sacarse el carnet sin la ayuda de una autoescuela, pero resulta costoso: se requiere un coche con dos pedales y el precio resulta mucho más elevado (y además deberemos encargarnos nosotros mismos de todo el "papeleo").

Una vez matriculado, la autoescuela proporciona libros y material online a sus alumnos para que puedan estudiar la parte teórica en todo momento.

3. SOMETERSE AL TEST PSICOTÉCNICO

El test psicotécnico no es nada por lo que hay que temer. Se trata de un test sanitario que nos da el certificado que indica que tenemos las aptitudes físicas y psíquicas para conducir. También detalla otras cosas relacionadas como la salud, por ejemplo, si necesitamos gafas o no para conducir.

El test cuesta entre unos 40 y 80 euros.

4. IR A CLASE

Aunque tengamos todo el material disponible para estudiar nosotros mismos, es muy importante tener la fase teórica muy clara para que no confundirnos con nada en los test del examen teórico (que también tienen sus preguntas trampa). Lo ideal es llegar a las clases con el temario aprendido y las dudas apropiadas.

5. SOMETERSE A LOS TEST Y AL EXAMEN TEÓRICO

Hay muchas aplicaciones y páginas web con preguntas tipo test de la DGT. Recordamos que el exámen teórico de la DGT para sacarse el permiso B (el de coche) se basa en 30 preguntas tipo test con 3 opciones de respuesta. De estas 30, solo podemos fallar 3.

Es por ello que es sumamente importante leer bien las preguntas y las respuestas, que muchas veces vienen acompañadas de una imágen que nos puede dar pistas sobre qué nos estan preguntando exactamente. 

6. EMPEZAR LAS PRÁCTICAS

Una vez superada la fase teórica, hay que empezar la práctica. Esto se hace mediante clases prácticas donde, además de aprender a circular, también se conocen a fondo las partes del vehículo y aspectos prácticos de su mantenimiento.

Las clases se hacen con el profesor situado al asiento del copiloto, que también tiene pedales. La situación es del todo segura: recuerda que en los coches de autoescuela se considera que el conductor es el profesor, no el alumno.

No tengas prisa para hacer el exámen. Acuerda una fecha con tu autoescuela y hazlo cuando tu profesor piense que estés preparado. El exámen dura unos 30 minutos, con unos 10 minutos de conducción libre, y unos 15 con indicaciones. En los 5 restantes el profesor puede hacerle preguntas relacionadas con el concocimiento del vehículo o el mantenimiento. Algunas de ellas podrían ser si el aceite del vehículo debe cambiarse en frío o en caliente, o como se encienden todo tipo de luces del vehículo.

Una vez superado este examen ya estaría todo... O casi.

7. LOS ÚLTIMOS PASOS: HACERSE CON EL CARNET Y PONER A PUNTO EL COCHE

Estos son los pasos que normalmente hacen más pereza. Cuando pensamos que ya hemos acabado con lo más difícil (los exámenes) hay otro reto: el "papeleo" y la puesta a punto.

El "papeleo" del que hablamos es el de conseguir el carnet provisional, que tarda aproximadamente una semana en llegar y que tiene una validez de tres meses. Se trata de un papel DIN-A4 que simplemente debes llevar contigo cuando cojas el coche. La autoescuela se encargará de dartelo junto a una L que deberás colocar a tu vehículo y que de no llevarla, podrías ser sancionado. Esta L se debe colocar en la parte izquierda del cristal trasero del coche. Poco tiempo después, te llegará el carnet ordinario a tu casa por correo.

Finalmente deberás encontrar un seguro adecuado a tus circunstancias y a tu vehículo (que quizás, aún no tienes).

Si eres joven o simplemente novato, puedes leer este artículo sobre como funcionan las compañías aseguradoras. Si también necesitas un coche, puedes leer estos consejos para comprar un coche nuevo que sea perfecto para tí, o lanzarte al mercado de ocasión, donde seguro que también puedes encontrar una buena ganga.