Renault: para todos los públicos

Renault está de celebración, pues cumple 120 años de historia, 120 años adaptándose a los cambios que se han ido dando en la industria del automóvil. Y no solo eso, sino que también aportando gran parte de las ideas que fueron dando lugar a todas esas transformaciones... Pero debemos remontarnos tiempo atrás. La aventura del fabricante francés empezó allá en el año 1898, cuando los hermanos Renault (Fernand, Louis y Marcel) fundaron la compañía, inicialmente llamada Renault-Frères. Los hermanos, sin embargo, tuvieron que esperar siete años para vislumbrar un éxito que, a partir de aquel momento, empezaría a ir a mayores. Para lo que no tuvieron que esperar tanto Fernand, Louis y Marcel fue para estrenar el que sería el primer logo de la marca. De hecho, apareció en 1900 y contaba con las iniciales de los hermanos y dos R -de Renault- entrelazadas en un medallón de estilo Art Nouveau.

No obstante, a partir del año 1906 y hasta 1923, el logo de la compañía cambió de forma continuamente, de la misma manera que también lo hizo el nombre. Durante la primera década del siglo XX, el medallón inicial fue sustituido por el coche Renault que ganó el Grand Prix de Francia en 1906, rodeado por una rueda dentada. El siguiente cambio que se sucedió fue de nombre, en 1910, cuando Louis Renault se convirtió en administrador único de la compañía y la empresa pasó a llamarse Société des Automobiles Renault.

En 1919, con el final de la Primera Guerra Mundial, Renault volvió a modificar su logotipo y cambió su coche de carreras por un tanque, que se entendió como una manera de conmemorar la contribución decisiva a la victoria del bando francés del tanque FT17, construido por el mismo fabricante. Además, Louis también cambió el nombre anterior por el de Société Anonyme des Usines Renault. En 1923, el tanque es sustituido por una simple forma redonda en la que se lee el nombre de la marca.

No fue hasta 1925 que Renault introdujo por primera vez el rombo o diamante como logotipo oficial de la firma, manteniendo el fondo de parrilla con el que ya contaba el logo anterior. Sin embargo, el logotipo, durante esos años, aún era empleado solamente en los modelos más lujosos de la compañía. Hasta 1930, que empezó a estar presente en todos los vehículos de la marca.

Otro de los cambios importantes fue, por ejemplo, el paso del logotipo en blanco y negro al color amarillo característico del fabricante francés, en el año 1946. Además, doce años más tarde, el rombo cambió de forma, estrechándose, estilizándose e incluyendo el nombre de Renault grabado en letras más estrechas, también.

En 1972, la dirección de Renault decidió simplificar el diseño del rombo al máximo, aunque la idea que daría lugar al conocido logo de rayas paralelas de la marca sería el diseño del franco-húngaro Victor Vasarely y permanecería intacto hasta 1992, año en que se le encarga el nuevo logo de la marca al estudio de Jacques Paumier (JPG Design).

Ya en 2004, el diamante se coloca sobre un cuadrado amarillo y las letras de Renault cambian su tipografía por otra ideada por Eric de Berranger. Finalmente, el último cambio llegó en 2012 con un nuevo diseño en el que se aprecia un logo más grande y vertical. Logo que, hasta el momento, se mantiene como el oficial de la marca que ahora cumple 120 años.