¿Hasta dónde saltará Duplantis?

Armand Duplantis (10 de noviembre 1999) nació y creció en Louisiana (EE.UU) pero defiende internacionalmente los colores de Suecia, el país de su madre Helena, una heptaleta. Su vida del chico parecía más que predestinada casi tres o cuatro décadas antes de su nacimiento, cuando su padre Greg ya saltaba con pértiga (su récord era de 5,80 metros). El hijo prosiguió el camino. Tenía solo cuatro años cuando ya saltaba en una colchoneta y un listón a la vez que jugueteaba con las pértigas.

A los 6 años su menudo cuerpo se eleva por encima de los 1,64 metros. Es el récord del mundo de su edad. A los 7, se va hasta 2,2 m. Con 9, logra otra mejor marca mundial, con 10 también, con 11 saltando 3,88...

Su carrera proseguiría de manera meteórica, subiendo centímetros al listón hasta que, siendo un imberbe de 18 años con su cuerpo poco musculado, franqueó en el Europeo de Berlín 2008 los míticos 6.00 metros y puso en su objetivo el récord del gran dios de esta especialidad, el ucraniano Serguei Bubka. Y, cómo no, también lo batiría: 6,16 al aire libre.

Rivales ‘frustrados’

 La superioridad de Duplantis ejerce un efecto devastador sobre el resto de rivales, frustrados cada vez que ‘Mondo’ vuela tranquilamente sobre los 6 metros mientras ellos padecen para siquiera acariciar esas alturas. El pasado sábado, en la reunión ‘All Star de Pértiga’ de la localidad francesa de Clermont-Ferrand, lo volvió a demostrar, cuando estableció, ya ya lleva seis, un nuevo récord del mundo de salto con pértiga tras imponerse con un registro de 6,22 metros.

Duplantis superó en un centímetro la anterior plusmarca universal que el mismo poseía con 6,21 desde el 24 de julio de 2022, cuando se coronó campeón del mundo al aire libre en Eugene. Desde entonces, que tenía como mejor marca en pista cubierta los 6,20 metros que saltó en los Mundiales 2022 de Belgrado, había tratado sin éxito superar su propio récord.

Lo intentó el pasado 2 de febrero en la localidad sueca de Uppsala, donde el propio Duplantis, de 23 años, organiza el ‘Mondo Classic’, pero falló en sus tres intentos sobre 6,22.

Al igual que ocurrió ocho días más tarde en Berlín, donde volvió a derribar por tres ocasiones el listón en su intento de establecer una nuevo récord del mundo. Una plusmarca de la que se quedó muy lejos el pasado 15 de febrero en Lievin (Francia), donde el pertiguista sueco ni tan siquiera buscó el récord, tras “conformarse” con una mejor marca de 6,01.

Pero a Duplantis, que no participará en los Europeos en pista cubierta que se disputarán esta semana en Estambul, le quedaba una última bala en el ‘All Star de Pértiga’.. No pudo el sueco con el listón en su primera tentativa, ni en su segundo intento, en el que ni tan siquiera llegó a alcanzar el listón. Dos fallidos intentos que Duplantis analizó junto con Renaud Lavillenie, que a pie de pista trataba de corregir junto con el sueco los mínimos defectos que le apartaban del récord.

Detalles que el escandinavo corrigió y, de qué manera, en su tercera tentativa, en la que superó con una claridad, que hace pensar que todavía tiene un margen de mejora, los 6,22 metros que suponían una nueva plusmarca universal. 

“No tengo palabras... Es increíble. Ni siquiera recuerdo los últimos minutos, ni siquiera el último salto”, señaló Duplantis. No existen limites para el sueco, que con toda seguridad tratará volverá a mejorar su plusmarca. La pregunta es: ¿hasta dónde? ¿dónde tiene el límite Duplantis?